Aimar ETXEBERRIA

Etxerat confía en crear en Bilbo «un mar para terminar con la política de excepción»

Etxerat mostró su adhesión a la movilización del 11 de enero en Bilbo y anunció que ese fin de semana no van a realizar las visitas previstas a sus familiares y amigos. Animan a «crear un mar con la corriente necesaria para terminar con la política de excepción».

La asociación de familiares de las presas y presos compareció ayer una rueda de prensa, en Donostia, para dar a conocer su adhesión a la movilización convocada por la iniciativa Tantaz Tanta para el día 11 en Bilbo y comunicar que ese fin de semana no realizará las visitas previstas a sus allegados encarcelados en los estados español y francés, en Inglaterra, Irlanda y Portugal.

Los representantes de Etxerat subrayaron que es «imprescindible» que todos los amigos y familiares de los presos participen en la movilización de Bilbo, «aunque para ello tengamos que renunciar a las visitas a las cárceles que tan importantes son tanto para nosotros como para nuestros allegados». Por ello, ese fin de semana no recorrerán «los miles de kilómetros que nos separan de nuestros seres queridos». «No pondremos nuestras vidas en peligro», añadieron.

Consideran que la del 11 de enero es «una cita importante con el respeto a los derechos humanos» y, por lo tanto, es necesaria la aportación de todos. «Estamos convencidos de que toda la sociedad se unirá a la filosofía del gota a gota -aseguraron los representantes de Etxerat-. De hecho, eso es en lo que verdaderamente confiamos».

Comentaron que los integrantes de la asociación tienen claro que «nuestra ola no será suficiente para cumplir con los objetivos», por lo que instan al conjunto de la sociedad a que participe en la movilización de Bilbo, ya que «conseguiremos, gota a gota, crear un mar con la corriente necesaria para terminar con la política de excepción que se nos aplica a nosotros y a nuestros allegados».

Luis Goñi, sin funeral

Por otro lado, Etxerat informó en una nota de prensa de que Luis Goñi, que se encuentra en la cárcel de Iruñea, no pudo acudir al funeral de su abuela, fallecida el martes. En principio, la dirección de la prisión le obligó a elegir entre ir a la ceremonia religiosa o al crematorio; él optó por lo segundo, pero se lo denegaron.

En la respuesta a su petición, se justifica la negativa indicando que Goñi participó «en un muro popular que impidió durante 12 horas dicha detención», lo que se califica de «estrategia pacífica», y que podía repetirse un acto de este tipo.