Arvind Kejriwal, activista del movimiento anticorrupción en India y líder del Partido Aam Admi (Hombre Común), juró ayer el cargo como nuevo jefe de Gobierno de Nueva Delhi ante unos 100.000 seguidores que portaban el emblemático gorro gandhiano.

«Nunca imaginé que podría haber una revolución como esta en Nueva Delhi (...). Nuestra victoria parece un milagro, no lo podía imaginar hace dos años. Hoy el hombre común ha ganado», afirmó Kejriwal en su primer discurso como nuevo jefe de Gobierno en el céntrico parque de Ram Lila, escenario hace dos años de las mayores protestas del movimiento anticorrupción.

Kejriwal ha decidido «poner fin al elitismo de los políticos en Nueva Delhi» y pidió durante su discurso «el fin de la corrupción», informó Efe.

Su partido, con solo un año de vida, fue la revelación de las elecciones de principios de diciembre con 28 de los 70 escaños en juego, mientras que el BJP obtuvo 32 y el Partido del Congreso, ocho.

Ninguna formación ganó suficientes diputados para formar un Gobierno fuerte y el BJP rechazó encabezar la Administración capitalina.

El AAP dijo que no haría coaliciones con otros partidos, pero en los últimos días consultó la población de la capital para sopesar formar Gobierno, y un 74% de los que respondieron le dieron el sí.