LAB mantiene que la última oferta de TCC «garantiza» la pérdida de poder adquisitivo
Los trabajadores de la empresa TCC, adjudicataria del servicio de transporte comarcal de Iruñerria, votarán hoy la aceptación o no de la última oferta planteada por la dirección y acordada con los sindicatos UGT, CCOO, ELA, CGT y ATU. Por su parte, LAB rechaza el acuerdo porque considera que la asunción del mismo supone «garantizar la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores, porque con este convenio siempre irá por debajo del IPC».
Los trabajadores de los autobuses de TCC, las populares villavesas, decidirán hoy si aceptan o no la última oferta de la dirección, acordada con la mayoría del comité de empresa -los sindicatos UGT, ATU, ELA, CCOO y CGT son favorables y LAB la rechaza-, con la mediación de la Mancomunidad.
El pasado sábado la asamblea de trabajadores echó atrás el acuerdo alcanzado la víspera entre el comité -con el rechazo de ELA y LAB- y la dirección de TCC. Los votos contrarios fueron 176 y los favorables, 123. El lunes, la empresa volvió a realizar una nueva propuesta con alguna pequeña modificación -que no se iba a hacer pública hasta la asamblea de ayer por la noche- y a ella mostró su respaldo ELA.
Por su parte, LAB mantiene su posición de rechazo porque considera que el acuerdo «garantiza» la pérdida de poder adquisitivo de los empleados de TCC «porque los salarios siempre irán por debajo del IPC».
El responsable del sector del Transporte de LAB en Nafarroa, Joseba Lima, explicó ayer que el preacuerdo no afronta las razones por las que los trabajadores de TCC llevan 24 días en huelga, y que consistían en «paliar los efectos del laudo estatal que suponía una baja de salarios del 5,38% con el argumento de dar estabilidad a la empresa». Con la protesta «pretendíamos mantener cláusulas antidescuelgue y la ultraactividad hasta un nuevo convenio, y garantizar también la recuperación de ese 5,38% más el IPC en los años en que hubiera beneficios».
Propuesta sobre el IPC
Sin embargo, en opinión de Lima, el último preacuerdo «vincula el incremento salarial al IPC con una fórmula muy retorcida de tal forma que aplicarán una subida salarial del 0,25% si el IPC anual es inferior al 1,5%; y si el IPC termina por encima del 1,5%, la subida sería la diferencia entre el 1,5% y ese IPC superior. Así, ese 1,5% será lo que se pierda de poder adquisitivo siempre que el IPC esté por encima de esa cifra», lamentó el dirigente de LAB.
Por otra parte, la oferta de TCC presenta una variante y es que, a partir de los 33.850.000 viajeros anuales, si hay un incremento de medio millón de usuarios, se compromete a una subida de salarios del 0,25% no consolidable. LAB cree que es una cifra muy difícil de alcanzar tanto este año como el siguiente. Además, la dirección anuncia que 25 de los conductores eventuales serán fijos en dos años si se firma el acuerdo, una oferta que LAB valora como «un caramelo muy goloso, pero que tiene muy poco que ver con las razones de la huelga»..
En cualquier caso, y ocurra lo que ocurra hoy, Lima destacó la huelga «ejemplar» de los trabajadores de TCC «con la participación del 100% de la plantilla y sin ningún esquirol».
Cambio en el recuento
Los sindicatos mayoritarios en el comité de TCC decidieron ayer modificar el sistema de votación. Si la primera oferta empresarial se votó en asamblea, ahora han optado porque las votaciones se realicen por turnos.
Fuentes del comité afirman que con este sistema quieren «garantizar» la participación de todos los trabajadores, aunque muchos empleados ven en ello una estratagema para que se ratifique el acuerdo y que la asamblea no se les vuelva de nuevo en contra como el sábado.
Bildu y Aralar denuncian la gestión del servicio por parte de TCC
Bildu y Aralar, tras expresar su «respeto» a lo que la plantilla decidida hoy sobre el preacuerdo alcanzado por el comité con la dirección, denunciaron el «problema de fondo» que supone la gestión del servicio realizada por la empresa TCC.
Así lo indicaron los representantes de ambos grupos al término de la sesión de la Mesa y de la Junta de Portavoces del Parlamento de Nafarroa celebrada ayer. Al respecto, Bakartxo Ruiz (Bildu) reiteró su opinión de que este conflicto laboral es «producto de una nefasta gestión, de una privatización con todas las consecuencias nefastas que ello ha traído», dijo, sobre la concesión de la prestación del servicio de transporte urbano comarcal a una empresa privada, TCC. «La solución a nuestro entender, desde el respeto a la decisión que asuma la plantilla, debe ser la de garantizar los derechos laborales, la de garantizar también los derechos de los usuarios y la calidad del servicio», resaltó Ruiz.
En la misma línea, por Aralar, Asun Fernández de Garaialde declaró «respetar el proceso de diálogo» mantenido en las últimas semanas entre trabajadores y empresa, aunque advirtió de que «hay que abordar el tema de manera definitiva y el fondo de la cuestión».
Así, apostó por «la gestión pública» del servicio de transporte comarcal y, en consecuencia, defendió la «rescisión» de la concesión administrativa otorgada en su día a TCC, un argumento «acorde con los informes jurídicos con los que cuenta la Mancomunidad, que dicen además que la empresa TCC está incumpliendo el pliego de condiciones». GARA
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