Los inversores empezaron el día decididos a hacer caja y así quedaba de manifiesto cuando el Ibex se iba a los 10.230 puntos a las primeras de cambio. Más tarde, se fue enderezando la situación, que se tornó positiva gracias a la buena salida de Wall Street. El día anterior, los índices de Nueva York se habían despedido en rojo. En la remontada del Ibex también colaboraban el mantenimiento de la prima de riesgo en niveles cercanos a los 200 puntos y un buen dato de ventas minoristas en Estados Unidos para el mes de diciembre. En Europa, se acogía con optimismo el aumento de la producción industrial en noviembre, el mayor desde mayo de 2010. El principal baluarte era Alemania, que creció un 2,4% mensual, en lo que es su mejor dato desde julio de 2011. En el lado de los obstáculos, se destacaron los malos resultados de JP Morgan, que ganaba un 7% menos en el cuarto trimestre, en tanto que Wells Fargo mejoraba su beneficio un 10% gracias a la eliminación de 6.200 puestos de trabajo. El Ibex frenó su ascensión en los 10.382 puntos, tras anotarse un 0,16%. Todos los índices europeos acabaron con subidas. Londres sumó un 0,14%, Fráncfort, un 0,32%, y París, un 0,36%. En el Ibex, Popular (-4,35%) sufrió el peor balance, penalizado por la rebaja de recomendación tras el rally de enero. Entre los grandes, BBVA (+0,52%) fue el mejor. Los títulos de IAG (+1,57%) y Bankinter (+1,18%) lideraron a los ganadores. En París, Alstom -aupado por rumores sobre una venta de activos- y Gemalto subían más de un 5%, mientras Vallourec (-2,49%) encajaba la mayor pérdida.