La puesta en marcha de la quinta fase de la denominada «solución Irati» permitirá que todos los pueblos situados en las inmediaciones del embalse de Itoitz dispongan de suministro de agua garantizado. Esta solución se ha alcanzado después de que el Ayuntamiento de Agoitz haya desbloqueado la continuidad de las obras, que ayer fueron inauguradas oficialmente por la presidenta del Gobierno navarro, Yolanda Barcina, y electos de la zona.

Según explicó el alcalde de Agoitz, Unai Lako (Bildu), en la pasada legislatura el Ayuntamiento de UPN no permitió que avanzasen las obras de la cuarta y quinta fase (la inaugurada ayer), una situación que en esta legislatura se ha logrado desbloquear.

El Ayuntamiento de Agoitz corre con los gastos de la asociación de municipios organizada para el suministro de agua. Hasta el momento, los demás ayuntamientos no abonaban su parte correspondiente porque no tenían garantizado el suministro.

«Era una situación completamente absurda, ya que en Iruñerria tienen la posibilidad de beber agua de Itoitz, pero pueblos que están a escasos kilómetros del embalse, como los de Longida o Urraulbeiti, no podían hacerlo», explicó Lako.

En este sentido, recordó que el pasado verano pueblos de Urraulbeiti tuvieron que recurrir al suministro de agua con camiones cisterna, lo que supuso un coste de unos 30.000 euros.

Repercusión económica

La paralización de las obras de las últimas fases de la «solución Irati» también ha supuesto un quebranto económico para el Ayuntamiento de Agoitz, que debía frente a unos costes de unos 80.000 euros al año desde 2007. Si los demás pueblos hubieran recibido el agua en su momento y abonado la parte correspondiente, esta cifra se hubiera situado en unos 45.000 euros al año.

«Es una cantidad importante para un Ayuntamiento como el de Agoitz, que, además, tiene una situación económica difícil porque no se han cumplido compromisos adquiridos por el Gobierno navarro», añadió Lako, que destacó la importancia de la posición adoptada por Bildu en Agoitz. «Hemos conseguido que mejore la situación de todos los pueblos, aunque el Gobierno nos eche la culpa de la disolución de la Fundación Itoiz», destacó.