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Cuatro trabajadores heridos en Donibane Lohizune a consecuencia de un rayo

Cuatro trabajadores sufrieron heridas de distinta gravedad -uno de ellos, con importantes quemaduras, fue trasladado a Burdeos- después de que un rayo impactase en una grúa en el barrio de Karsinenea, en Donibane Lohizune. Hoy, continúa la alerta meteorológica.

En el barrio de Karsinenea, junto a la Policlínica de Donibane Lohizune, tuvo lugar ayer el suceso más grave relacionado con el temporal que soporta Euskal Herria y que hoy continúa con alerta por olas de hasta siete metros, nieve a 500 metros y vientos de hasta 100 km/h.

En torno a las 11.00, según la emisora de radio France Bleu, un rayo impactó en una grúa de construcción e hirió a cuatro trabajadores que estaban en las cercanías de la estructura metálica. A dos se les atendió en el centro sanitario próximo mientras los otros dos fueron trasladados por los servicios de emergencias hasta el Hospital de Baiona; posteriormente, uno de ellos debió ser llevado hasta Burdeos, dada la gravedad de las quemaduras que presentaba.

Bomberos de los parques de Donibane Lohizune, Hendaia y Senpere se desplazaron hasta el lugar del suceso, donde trabajaban unas 40 personas. La Policía y la Inspección de Trabajo investigan para determinar las causas exactas del siniestro y si las reglas de seguridad en las obras de construcción de varios bloques de viviendas se cumplían.

Fue el hecho más destacable de una jornada en la que los servicios de emergencia estuvieron atentos especialmente al fuerte oleaje y advirtieron de que el mar será uno de los espacios críticos, como también lo será el interior con la bajada de la cota de nieve hasta los 500 metros. Por ejemplo en Gasteiz, los responsables municipales activaron la fase de preemergencia por nevadas, al igual que lo hiciron las diversas instituciones competentes en todo el país.

Alerta por olas de siete metros

Por esa situación de alerta, el Consistorio donostiarra despejó de coches la zona más cercana al Paseo Nuevo, retiró contenedores y permitió aparcar en superficie en la Plaza Zuloaga durante la pasada noche a los vehículos de la segunda planta del parking ante la posibilidad de olas de siete metros. Fueron algunas de las decisiones adoptadas por la Mesa municipal de Crisis, que se reunió para analizar la alerta naranja y las previsiones de lluvia que pudieran afectar al caudal del río Urumea.

El Ayuntamiento decidió colocar sacos de arena en el acceso a la Plaza Zuloaga, a la altura de la Sociedad Fotográfica, para evitar que el agua llegue hasta la Parte Vieja, como ocurrió el 6 de enero.

En Hondarribia, tras el último desprendimiento de tierra ocurrido en la carretera del faro, el Ayuntamiento reclamó a Diputación, Lakua y Dirección de Costas -que tienen competencias en la zona- «que colaboren en la búsqueda de la solución más óptima para el problema». También tuvo que cortarse por un desprendimiento ayer a la tarde la carretera N-643, entre Getaria y Zumaia.

Izagirre demanda a URA «soluciones a corto plazo»

El alcalde de Donostia solicitó ayer una reunión urgente con la Agencia Vasca del Agua-URA para abordar «soluciones a corto plazo» contra las inundaciones que afectan, principalmente, a los barrios de Martutene y Txomin Enea por las crecidas del Urumea.

En opinión de Juan Karlos Izagirre, el «enfado» de los vecinos «está totalmente justificado». «Son unos barrios que se han construido totalmente de espaldas al río y las consecuencias son las que estamos viendo ahora, como lo han visto durante años», manifestó.

Recordó al vecindario que, a través de la comisión interinstitucional, «se están dando los pasos que hay que dar» y detalló que las reuniones de este foro «han marcado cuáles son esos pasos, se han marcado proyectos, incluso se han adjudicado obras, pero las obras de las que estamos hablando requieren un cambio de los barrios muy importante y van a requerir unos cuantos años». El primer edil pidió a los afectados que cuando se activen las alarmas «se haga caso a las recomendaciones que se suelen enviar» e insistió en que «la solución definitiva de estos barrios requiere de unas actuaciones urbanísticas de gran calado».