Los inversores aprovecharon su oportunidad para tomar plusvalías después de cuatro días consecutivos de avance e hicieron que el Ibex perdiera los 10.000 puntos. No hubo ninguna noticia negativa. Por el contrario, volvía a dar otra alegría el mercado de deuda por la caída de la prima de riesgo por debajo de los 190 puntos básicos y una rentabilidad del bono inferior al 3,6%. Fue, por tanto, un repliegue derivado de las subidas anteriores, sin que pueda darse por terminado el intento de consolidarse por encima de los 10.000 puntos. Los inversores tienen mañana una cita con la nueva presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, que hablará por primera vez en el Congreso desde su acceso al cargo. Así las cosas, el Ibex detuvo su corrección en los 9.982,70 puntos, después de ceder un 0,89%. Del resto de las plazas europeas, solo Fráncfort (-0,13%) repetía balance negativo. Londres ganó un 0,30%, y París, un 0,21%. Por valores del Ibex, el más alcista era Sacyr (+2,61%), pese a que puede acabar apartada de las obras del Canal de Panamá si no hay acuerdo. Popular (+1,99%) y Jazztel (+1,24) le secundaron en el podio de los mejores. En el lado de las caídas, el protagonismo era para el grupo de los valores de mayor capitalización. Todos ellos acababan en rojo. Los peores fueron BBVA, Santander, Inditex y Telefónica al dejarse más de un 1%. ArcelorMittal (-3,24%) y OHL (-2,02%) sufrieron los mayores descuentos. En París, L'Oréal saltó un 4,45% y fue el mejor de la sesión. La venta del 29% de la compañía, en manos de Nestlé, y los rumores sobre el comprador le facilitaron la subida.