Amaia U. LASAGABASTER
SEGUNDA A El Eibar se hace con el liderato

Un momento histórico

Los azulgranas nunca habían ocupado el primer puesto de la clasificación a estas alturas de la temporada.

El Eibar de Gaizka Garitano hace historia. Una expresión que, de tan manida, puede haber perdido valor pero que en este caso se ajusta milimétricamente a la realidad. Por primera vez en su historia, el Eibar alcanza el liderato de Segunda sobrepasado el ecuador de la Liga. Nunca a estas alturas de la competición habían ocupado el primer puesto de la tabla los azulgranas.

Ya en cualquier momento, teniendo en cuenta las circunstancias en las que compite el club azulgrana, resultaría destacable el liderato, pero son las fechas las que subrayan su meritorio rendimiento. Con poco más de un tercio de calendario por cubrir, ya no cabe hablar de fortuna o de casualidad. El Eibar es el líder de Segunda porque es el mejor de la categoría. Y así lo dicen todos los números. Es el equipo que más victorias ha celebrado (12, como el Deportivo), el mejor local (23 puntos como Ponferradina, Córdoba y Sabadell), el segundo mejor visitante, el quinto máximo goleador, el segundo menos goleado y, lógicamente, el que más puntos ha sumado. Los mismos 42 que el Deportivo aunque con mejor golaverage.

Y todo ello con un equipo que apenas conoce la categoría. Más de la mitad del once tipo que viene utilizando Gaizka Garitano en las últimas jornadas participó en el ascenso la temporada pasada. Prácticamente los mismos que han debutado este año en Segunda A. Inexperiencia que es extensible al propio técnico, con un currículum, a sus 38 años, todavía corto. Nada más colgar las botas, ejerció durante una campaña de ayudante de Ángel Viadero en el banquillo del Eibar, dirigió después dos años el filial armero y la temporada pasada se hizo con el primer equipo, ya como máximo responsable y con los resultados ya conocidos. Como sucede con buena parte de sus futbolistas, esta es su primera experiencia, como técnico, en Segunda A.

Precedentes

No tenían mucha más algunos de los entrenadores que habían situado anteriormente al Eibar en lo más alto de la clasificación. El último en conseguirlo había sido José Luis Mendilibar, hace ya nueve años, en aquella inolvidable campaña 04/05, en la que su equipo lideró la clasificación durante cuatro jornadas -de la 11ª a la 14ª- y se situó casi siempre en puestos de ascenso. Solo tres puntos le separaron de Primera, categoría en la que estuvo durante algunos minutos en la última jornada. Aquel Eibar acabó en la cuarta plaza, el mejor puesto de la historia.

Solo uno por debajo había acabado con Periko Alonso y José Mari Arakistain. El tolosarra, que se sentó en el banquillo de Ipurua durante cuatro temporadas, llevó al equipo al primer puesto durante cuatro jornadas de la 96/97 (3ª, 4ª, 5ª y 18ª, la más tardía en la que el Eibar había ostentado el liderato hasta ahora) para acabar la Liga en el quinto puesto. La derrota contra Osasuna en el derbi que cerró la temporada en Ipurua privó al club de ingresar los 150 millones con que la Liga premió al cuarto clasificado aquel año, en el que se redujo el número de ascensos a tres.

Tres temporadas antes, José Mari Arakistain también había conseguido concluir la Liga en la quinta plaza, aunque no llegó a disfrutar del honor de ocupar el primer puesto. Sí lo había hecho el Eibar de Alfonso Barasoain durante cuatro jornadas de la 88/89, temporada en la que, curiosamente, acabó salvándose con ciertos apuros.

Puntuación

Nunca hasta ahora, sin embargo, había concluido la 25ª jornada con el equipo azulgrana en lo más alto de la clasificación. Aunque sí con más puntos. En la temporada de Mendilibar, por ejemplo, tenía tres más siendo cuarto; e incluso en la 94/95, tenía uno más que ahora, estando en la quinta plaza.

De hecho, hay que remontarse más de tres décadas en el tiempo, hasta la temporada 80/81, para encontrar un líder que a estas alturas tuviera menos puntos de los 42 que tiene el Eibar. Era el Castellón aunque, curiosamente, con el actual sistema de los tres puntos por victoria, el segundo clasificado en aquel momento, el Rayo, habría sido líder. Aunque también con menos puntos, 41 frente a 42, que el Eibar.

Una puntuación bastante por debajo de la media y consecuencia evidente de la igualdad que está caracterizando a la categoría esta temporada. También hay que retrotraerse muchas décadas para encontrar otra campaña en la que hubiese tan pocas diferencias entre la cabeza y la cola de la clasificación. Referencia a la que, por cierto, siguen aferrándose los azulgranas. Y es que ni siquiera un momento histórico como el actual afecta al discurso de Gaizka Garitano y sus hombres, que solo hablan de los trece puntos que les separan del descenso y de los ocho que les faltan para alcanzar la permanencia. De momento les funciona.