GARA
Kartzeleratze politikoak Euskal Herrian

Una simple pancarta concluye con la joven Amezaga encarcelada a golpes

Agentes de paisano sin identificar, acompañados por efectivos de la Brigada Móvil, detuvieron ayer a Jone Amezaga, condenada a un año y medio de prisión por colocar una pancarta. Los ertzainas utilizaron porras extensibles y material antidisturbios para disolver a las personas congregadas en el mercado de Gernika, que se solidarizaron con la joven de Errigoiti arropándola con sus cuerpos, de modo pacífico. La carga provocó dos heridos, una de 94 años.

Agentes de paisano armados con porras extensibles y miembros de la Brigada Móvil pertrechados con material antidisturbios irrumpían ayer a las 11.00 en el mercado de Gernika para detener a Jone Amezaga. Los ertzainas golpearon y empujaron a los congregados, que se dieron cita en el centro de la villa para defender a la joven, condenada a un año y medio de prisión por «enaltecimiento del terrorismo». La Audiencia Nacional la había juzgado por una pancarta aparecida durante la feria del último lunes de octubre de 2012. El fallo del tribunal de excepción fue ratificado por el Tribunal Supremo y asumido como una orden por la Ertzaintza.

Amezaga, que ha permanecido 18 días escondida, anunció este fin de semana su intención de volver a la vida pública. «He tomado una decisión, voy a vivir libre», destacó este domingo ante las personas que se acercaron a Gernika, reconvertida en «pueblo libre» gracias al trabajo de la dinámica «Jone Libre». En coherencia con sus palabras, salió ayer a la calle para disfrutar de un café con sus amigos y dar un paseo hasta el mercado, donde se reunió un nutrido grupo de personas, entre las que se hallaban sus padres, el parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga o la diputada de Amaiur Onintza Enbeita. Todos la recibieron con abrazos y al grito de «Jone libre!».

Pero la calma y las sonrisas apenas duraron unos minutos. En un primer momento hicieron su aparición varios agentes de paisano, que utilizaron sus porras extensibles -limitadas a los ertzainas que actúen no uniformados y que hayan recibido la formación pertinente- para dispersar a los presentes. Testigos remarcaron a GARA que los agentes no portaban ningún distintivo que les identificase como ertzainas. Tampoco confirmaron que estos se identificasen como tales mientras golpeaban y empujaban a los presentes, que trataron de crear un cinturón humano alrededor de Jone Amezaga.

La barrera cayó cuando accedieron al mercado los integrantes de la Brigada Móvil, que utilizaron sus porras y sus escudos contra quienes defendían a la joven de Errigoiti. Según informaron desde la dinámica «Jone Libre», dos mujeres, una de ellas de 94 años, resultaron heridas durante la actuación de la Ertzaintza. El padre de Amezaga también fue agredido. Al final, los agentes detuvieron a la joven, que ayer mismo pasó a disposición judicial.

Críticas al PNV

En declaraciones a GARA, Itziar Amezaga, la madre de Jone, valoró la actuación de la Ertzaintza como «muy violenta». «Hemos intentado protegerla para que no se la llevaran», explicó tras señalar que los miembros de la Policía autonómica «nos golpearon a todos». Denunció que el PNV es el responsable de esta «injusticia». «Hablan de paz, pero envían a la Ertzaintza para golpear al pueblo», añadió.

En un comunicado, los miembros de la dinámica «Jone Libre», que convocaron una manifestación para denunciar la detención, también censuraron la actitud de la formación jeltzale. «Hemos leído declaraciones de algunos ayuntamientos de la comarca que pedían a la Ertzaintza que suspendiera la orden de busca y captura, incluidos ayuntamientos gobernados por el PNV, como Errigoiti y Kortezubi», destacaron tras señalar que el partido de Andoni Ortuzar se abstuvo en la votación de las declaraciones. Sin embargo, ayer Lakua prefirió cumplir con su «obligación».

Una vecina de 94 años, hospitalizada tras la carga con heridas en pierna y muñeca

Una mujer de 94 años resultó herida ayer durante la actuación de la Ertzaintza. Según informaron a GARA testigos presenciales, la anciana fue arrollada por un agente de la Brigada Móvil, que la derribó al entrar en el mercado de Gernika, donde arrestaron a Jone Amezaga.

Como consecuencia de la caída, la mujer perdió el conocimiento ligeramente, sufrió heridas en una pierna y en la muñeca, y la rotura de varios huesos de una mano. Además, apuntan que estuvo en el suelo varios minutos sin recibir auxilio, ya que, según los presentes, la Policía autonómica lo impidió.

La dinámica «Jone Libre» indicó que, tras ser atendida, la anciana fue trasladada en ambulancia a un centro hospitalario, y denunció que otra mujer también fue evacuada por los golpes recibidos en las costillas. La Ertzaintza dice que lo consta.

Las redes sociales mostraron su enfado con la versión policial, y comenzaron a compartir unas imágenes en el que muestran las lesiones de la anciana -pueden verse en la parte superior de está pagina-. «El Departamento de Seguridad dice que no hay heridos, pese a que las imágenes revelan lo contrario», señaló «Jone Libre» en un mensaje publicado en Twitter.

Otras imágenes de la detención evidencian que la Ertzaintza utilizó porras extensibles durante la operación contra Amezaga. Y el padre de la joven recibió un golpe en la cara con el escudo protector de un agente de la Ertzaintza. GARA

Para la consejera de Seguridad, la Ertzaintza ha cumplido «su obligación»

La consejera de Seguridad se escudó en que la Ertzaintza ha cumplido con su «obligación», al detener a Jone Amezaga. «Ha ejecutado una orden de la Audiencia Nacional», destacó Estefanía Beltrán de Heredia, que admitió que la Policía autonómica se topó con una «cierta resistencia» en el mercado de Gernika, donde se dieron cita decenas de personas para mostrar su apoyo a la joven de Errigoiti.

Al igual que ocurrió en el pleno del pasado viernes en el Parlamento, la consejera no explicó por qué la Ertzaintza pidió el 21 de noviembre una orden de detención inmediata a la Audiencia Nacional, que había dado a la joven un plazo de diez días para ingresar en prisión. Tras tener conocimiento de que la sentencia contra Amezaga era firme, la Oficina Central de Inteligencia de la Ertzaintza pidió una orden de detención inmediata contra la joven para evitar que durante el periodo voluntario de ingreso en prisión se pudiera organizar un muro popular y trató de arrestarla ya el 25 de noviembre. Adujo para ello que Jone Amezaga es dirigente de Ernai, «sustituto de las ilegalizadas Jarrai, Haika y Segi».

Julen Arzuaga (EH Bildu), que la semana pasada calificó de «infecto» el citado informe policial, se desplazó ayer a Gernika. Tras presenciar la detención, el parlamentario exigió otra actitud al lehendakari y al Departamento de Seguridad «ante los mandatos de los tribunales de excepción de Madrid». «La Ertzaintza no solo ha obedecido a la Audiencia Nacional, sino que ha ido mas allá, puesto que remitió un informe para acusar a Jone, pidió su detención y así lo ha hecho. Es el Gobierno del PNV el que ha promovido lo que hemos vivido en Gernika», recalcó.

También censuró la detención de la joven. A su parecer, su arresto «es tan injusto como incomprensible. Jone tiene derecho a vivir libre y con esa intención ha decidido hacer vida pública y normalizada en Gernika. Nadie entiende su detención, como lo demuestra el apoyo que ha recibido tanto de la ciudadanía como de los ayuntamientos de la zona».

La diputada de Amaiur Onintza Enbeitia denunció que, con la actuación de ayer, «los fascistas han entrado en dos ocasiones en el mercado de Gernika», en alusión al bombardeo de la Legión Cóndor en 1937. Asimismo, señaló que «ha quedado claro quien tiene dignidad y quien hace uso de la violencia». GARA