La jornada de ayer pasó de rojo al verde en el Ibex gracias a los datos de Estados Unidos y al deseo de que los esfuerzos de Grecia por acordar con Europa acaben bien. Hasta las primeras horas de la tarde, los inversores no encontraron ningún estímulo solvente para respaldar sus compras. Pero la publicación de las cifras de empleo de enero en Estados Unidos dio pie al cambio de tendencia. Se crearon el mes pasado 257.000 empleos, muy por encima de las previsiones. Asimismo, se revisaron al alza las cifras previas de noviembre y diciembre. Y lo más importante: durante 2014 se crearon mensualmente más de 200.000 puestos de trabajo, algo que no ocurría desde 1994. Sin embargo, la tasa de paro subía una décima, hasta el 5,7%. Los expertos creen que la mejoría del mercado laboral -también han aumentado los salarios- va a acelerar la subida de los tipos de interés. En Europa, Grecia y Bruselas concentran todas las miradas. Los inversores esperan un acuerdo favorable para todas las partes, pese a la oposición de Alemania y la presión del BCE. El Ibex cerró con 10.573,10 puntos, tras ceder un 0,36%. En la semana avanza un 1,63%. En Europa, la respuesta fue distinta y sus índices lo reflejaron con caídas. Fráncfort bajó un 0,54%, París, un 0,26%, y Londres, un 0,18%. El mejor del Ibex fue Bankia (+3,14%), tras conocerse que pagará un máximo de 250 millones de euros por su fraudulenta OPV. El resto lo pondrá el Estado. En París, Alcatel-Lucent (+3,51%) lideró las alzas, frente a Legrand (-2,77%), el peor del día.