Lokarri considera que el proceso de paz se encuentra en el comienzo de una n ueva etapa en la que se van dando las condiciones para «un impulso en la consolidación» del mismo. Entre los acontecimientos que menciona, destaca el comunicado de EPPK en el que acepta «el proceso de reintegración por vías legales», el paso dado por ETA poniendo fuera de uso operativo parte de su arsenal, el Plan de Paz y Convivencia de Lakua y las «mejoras» generales en la convivencia diaria.
A su juicio, en esta etapa «el objetivo es asentar y consolidar el proceso de paz» y cita cuatro «grandes avances» que pueden impulsar esa consolidación. El primero, que «ETA complete el proceso de desarme en un tiempo prudencial»; segundo, que el Gobierno español acerque a los presos vascos; tercero, que Lakua «complete la tarea de reconocer a todas las víctimas de vulneraciones de Derechos Humanos»; y, por último, que «los partidos políticos retomen el trabajo de la Ponencia de Paz o bien creen un espacio de colaboración y diálogo donde lograr consensos para impulsar el proceso de paz y mejorar la convivencia de manera compartida e inclusiva».
En relación a este último punto, Lokarri ha manifestado su «estupor y preocupación por el hecho de que no haya ningún espacio de diálogo y colaboración entre los partidos políticos». «Durante muchos años se ha dicho que no hacía falta poner en marcha una mesa de partidos porque para eso ya estaba el Parlamento. Ahora, incluso sin violencia y con todos los grupos representados, ni siquiera trabajan juntos en una comisión parlamentaria», ha señalado.
Lokarri solicita a todas las formaciones que hagan «una profunda autocrítica» al respecto por su «comportamiento en este momento en el que la sociedad vasca necesita entendimiento y altura de miras».
«En vez de centrar todos sus esfuerzos en criticar a ETA o al Gobierno por lo que hacen o dejan de hacer, los partidos políticos deberían centrarse más en asumir su tarea y ser activos en la construcción de la convivencia», ha concluido.