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Trump confirma que las redadas comenzarán el domingo y se deportará a miles de inmigrantes

Las autoridades de Nueva York y Los Ángeles y la Unión de Libertades Civiles de Estados Unidos (ACLU) han mostrado su rechazo a las redadas masivas contra inmigrantes en situación irregular anunciadas por Donald Trump y que, según ha informado ‘The New York Times’, comenzarán el domingo en diez ciudades simultáneamente.

Un vehículo de la Patrulla Fronteriza de EEUU hace guardia junto al muro que hace de frontera con México. (Mario TAMA / AFP)
Un vehículo de la Patrulla Fronteriza de EEUU hace guardia junto al muro que hace de frontera con México. (Mario TAMA / AFP)

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha confirmado esta tarde que su Gobierno iniciará este domingo redadas masivas en diez ciudades del país para deportar a «miles» de inmigrantes en situación irregular, y ha indicado que planea visitar en algún momento un centro de detención para inmigrantes.

La Administración Trump va a iniciar el domingo redadas masivas en, al menos, diez ciudades de EEUU simultáneamente para detener a inmigrantes en situación irregular y a sus familiares. Lo había adelantado "The New York Times" el jueves y lo ha confirmado Donald Trump esta tarde. Las autoridades de Nueva York y Los Ángeles y la Unión de Libertades Civiles de Estados Unidos (ACLU) han mostrado su frontal rechazo.

En declaraciones a los periodistas en la Casa Blanca, Trump ha respondido afirmativamente cuando le han preguntado si es cierto que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) empezará sus redadas este domingo, como adelantaron medios locales.

«Es una operación enorme, si se ha filtrado que va a comenzar no pasa nada, empieza el domingo, y vamos a sacar de aquí a miles de indocumentados», ha asegurado. «Tengo la obligación de hacerlo (...). Si entran ilegalmente, se van fuera», ha subrayado.

Unos 2.000 migrantes

Según "The New York Times", el ICE buscará primero a unos 2.000 inmigrantes que ya han recibido órdenes de deportación y que, en algunos casos, no se presentaron a las audiencias en los tribunales de inmigración.

«En la medida en que sea posible, los miembros de familias arrestados juntos serán llevados a centros de detención para familias en Texas y Pensilvania. Pero, debido al espacio limitado, algunos podrían terminar en hoteles mientras se preparan sus documentos de viaje», añadió.

Entre las ciudades en que podrían llevarse a cabo esas redadas están Nueva York, Miami (Florida), Houston (Texas), Los Ángeles y San Francisco (California), Chicago (Illinois), Atlanta (Georgia), Nueva Orleans (Luisiana), Baltimore (Maryland), Houston (Texas) y Denver (Colorado).

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, ha denunciado la decisión de Trump, que ha calificado de «directiva despreciable e inhumana». Asimismo, Cuomo, que prometió hacer frente a las medidas de la Administración Trump, ha señalado que su estado «continuará apoyando a todos los inmigrantes para asegurar que todos ellos tengan todas las protecciones que brinda la ley» y ha dado aviso a los departamentos estatales afectados para que ayuden a las familias que necesiten servicios legales.

La fiscal general del Estado, Letitia James, por su parte, ha asegurado en un comunicado que «la insistencia de la Administración Trump de utilizar a las familias migrantes como una pieza de negociación con los líderes del Congreso es tan deplorable como un acto contra los valores estadounidenses». «Como responsable de los cuerpos de seguridad de Nueva York, haré lo que esté en mi mano para asegurar la protección de los derechos de estas familias. Me enfrentaré a cualquier incursión o amenaza de posible violación de los derechos civiles de nuestro estado porque, en Estados Unidos, valoramos a nuestra comunidad inmigrante», ha zanjado James.

Leyes «santuario»

El alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, también se ha plantado ante las intenciones de Trump y ha declarado a medios locales que los residentes de la ciudad deben saber que se hará respetar las leyes «santuario» que rigen en el estado y que impiden la colaboración de policías locales con el ICE en materia migratoria, de competencia federal.

La ACLU presentó ayer en Nueva York una demanda ante una corte federal contra el fiscal general, William Barr, y el ICE, entre otros, con la que pretende paralizar estas redadas que consideran ilegales de pleno derecho. Los demandantes «buscan prevenir deportaciones inminentes en violación de los principios más básicos de un proceso justo: el derecho a ser avisado y una oportunidad para ser escuchado». Y recuerda la ACLU que «varios tribunales han emitido medidas cautelares contra el uso por parte del ICE de las deportaciones en masa libres de proceso, donde poblaciones en concreto han sido puestas en el punto de mira», con el objetivo de garantizar un procedimiento judicial justo.

A mediados de junio, Trump anunció por Twitter que el ICE iniciaría un proceso para deportar a «millones» de inmigrantes en situación irregular. Poco después, se supo que el ICE planeaba redadas masivas en 10 ciudades del país a partir del 23 de junio para aumentar las deportaciones de familias «sin papeles» que han recibido órdenes de expulsión.

Pero Trump decidió entonces suspender durante dos semanas las redadas, plazo que acabó el pasado domingo, para dar tiempo a que demócratas y republicanos pactasen un acuerdo migratorio en el Congreso, cosa que hasta la fecha no se ha producido. Hace unos días dijo que empezarían después del 4 de julio.