La concejala de Regeneración Urbana del Ayuntamiento de Bilbo, Gloria Múgica, y Marta Ibarbiba, directora de Surbisa (la sociedad municipal que incentiva y gestiona la rehabilitación de edificios, viviendas y locales en zonas degradas de Bilbo) ha informado este martes que Surbisa pagará las obras de rehabilitación y mejora de edificios degradados aprobadas por una comunidad de vecinos a aquellos propietarios que se encuentren en situación de insolvencia económica.

La nueva línea de ayudas que se pondrá en marcha se aprobó en la reunión que mantuvo ayer lunes el consejo de esta entidad, que también acordó un presupuesto para la regeneración de edificios y viviendas de dichas zonas para 2020 de 1.520.000 euros y retomar las ayudas económicas a los tratamientos antitermitas y extender a cuatro años, en vez de los tres actuales, la subvención a las comunidades de vecinos con menos posibilidades económicas, para pagar a sus administradores de fincas.

Esta línea de subvenciones está destinada a aquellos propietarios que no pueden hacer frente ni al 30 por ciento de su parte de las obras comunitarias de rehabilitación y mejora de sus edificios de viviendas, que es el porcentaje que las subvenciones actuales de Surbisa no cubre, se ha adoptado para evitar que se paralicen obras de interés general para la comunidad o tengan que abandonar su residencia habitual.

La concejala de Regeneración Urbana, Gloria Múgica, ha señalado que este tipo de ayudas del 100 % de la obra, no son una subvención a fondo perdido, ya que, como condición para concederlas, el propietario beneficiado se comprometerá a devolverlas en el caso que venda la vivienda o la transmita en donación o herencia a uno nuevo, salvo que el nuevo propietario se encuentre en la misma situación de insolvencia económica que el beneficiario.

Las nuevas Bases para la concesión de ayudas a la rehabilitación aprobadas ayer por el consejo de Surbisa estarán vigentes los años 2020, 2021, 2022 y 2023.

Como viene sucediendo desde que se creó esta sociedad municipal, las ayudas económicas buscan propiciar la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos mediante intervenciones de rehabilitación y mejora de las condiciones de habitabilidad, de la accesibilidad, de la eficiencia energética y de la imagen de la ciudad.