Djovkovic ha conquistado su noveno título del Abierto de Australia en una final espectacular y corta en la que ha fulminado a su rival Medvedev.

El primer clasificado mundial se ha recuperado a tiempo de la lesión abdominal que sufrió en su partido de tercera ronda contra Taylor Fritz para abrumar a un Medvedev que llegaba a la cita con una racha de veinte victorias, y con serias aspiraciones.

Djokovic ha conseguido, de esta forma, su decimoctavo ‘major’ que le sitúa a dos de diferencia con los veinte del suizo Roger Federer y el español Rafael Nadal.

Con su victoria, el balcánico se ha convertido en el segundo tenista en conseguir nueve títulos de Grand Slam en uno de los cuatro torneos. El primer jugador en lograr esta gesta fue Nadal con su corona en 2014 en Roland Garros.

Por su parte, Medvedev ha desperdiciado su segunda oportunidad de conseguir un grande después de su tropiezo en la final del Abierto de Estados Unidos de 2019 ante un Nadal que gracias a la victoria de Djokovic hoy en Melbourne Park conserva su segunda plaza mundial.

Ha arrancado Djokovic a un ritmo vertiginoso tras colocarse 3-0 por delante en el marcador cuando el público todavía se encontraba accediendo a una pista Rod Laver Arena que se ha mantenido a puerta cerrada durante cinco días entre la primera y la segunda semana de la competición como consecuencia del confinamiento en Melbourne.

El primer set ha sido despiadado con grandes intercambios, sobre todo de revés, pero la eficacia de Djokovic al resto le ha servido para romper la igualada con el 5-5 y apuntarse un primer acto, que luego que acabaría siendo definitivo, porque ahí ha minado la fortaleza del aspirante.

El moscovita de 25 años no se ha rehecho y se ha desesperado con la brillantez de su oponente, hasta el punto de destrozar la raqueta tras impactarla contra el suelo en el último tramo de un segundo parcial que ha caído del lado del balcánico por 6-2.

El público ha intentado traer de vuelta a un desaparecido Medvedev que ha acariciado una temprana rotura que se le ha terminado escapando y la cual ha dado alas a Djokovic para cerrar rotundamente el último parcial por 6-2 tras casi dos horas de lucha.

Medvedev ha puesto fin a una meritoria racha de veinte victorias y diez de ellas conseguidas frente a miembros del top-10 que le ha situado como uno de los tenistas más en forma y por lo tanto «el hombre a batir», como había asegurado el propio Djokovic en rueda de prensa.

Al ruso le ha pasado factura la presión añadida que ha generado tanto su gran estado de forma como las palabras de Djokovic, después de cometer treinta errores no forzados que le han condenado en su intento de destronar al rey del ‘major’ australiano.

Su tropiezo ha significado otra decepción para una nueva generación que se muestra incapaz de asaltar el dominio de Djokovic, Nadal y Federer en la última década. Por contra, ‘Nole’, de seguir así, incluso podría sobrepasar este mismo año al suizo y al español en la lista de máximos ganadores de títulos de Grand Slam.