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Google no usará ‘cookies’ de terceros ni similares para dar publicidad personalizada

Google se ha comprometido este miércoles a no reemplazar con otro sistema las ‘cookies’ de terceros que utiliza actualmente, mecanismo que emplea para ofrecer publicidad personalizada, una vez las elimine de su navegador Chrome dentro de un año.

Una de las sedes de Google. (Walter BIERI / EPA)
Una de las sedes de Google. (Walter BIERI / EPA)

La firma del buscador más usado del mundo ya adelantó a principios de 2020 su intención de eliminar las controvertidas ‘cookies’ en Chrome, pero el anuncio de este miércoles añade que, una vez eso ocurra, la empresa no las sustituirá por otra tecnología similar, algo con lo que se había especulado.

«Hoy hacemos explícito que una vez suprimamos las ‘cookies’ de terceros, no crearemos identificadores alternativos para seguir a los internautas mientras navegan a través de la web y no los usaremos en nuestros productos», ha explicado en una entrada en el blog de la compañía el director de gestión de producto, privacidad publicitaria y confianza, David Temkin.

Las ‘cookies’ de terceros son las enviadas al ordenador, móvil u otro dispositivo conectado a internet por parte de un tercer dominio, es decir, ajeno a la página que se está visitando, y son usadas habitualmente para «rastrear» los hábitos del usuario en internet y ofrecerle publicidad personalizada.

En este sentido, cabe diferenciarlas de las ‘cookies’ originales o de primeros, enviadas al sistema por el dominio que se está visitando para agilizar y facilitar la navegación y futuras visitas mediante, por ejemplo, el recuerdo de nombres de usuario y contraseñas o de preferencias de navegación.

Casi dos tercios del mercado

Por la valiosa información que aportan sobre los internautas, sus preferencias y hábitos, las ‘cookies’ constituyen un pilar básico de la publicidad en internet y se usan para vender a los anunciantes espacios digitales de difusión ajustados al público al que se dirigen.

Con un 64 % de cuota de mercado a nivel mundial, Chrome es el navegador más usado, muy por encima de Safari –propiedad de Apple– y del independiente Firefox. Estos últimos dos competidores de Google ya hace tiempo que bloquearon las ‘cookies’ de terceros en sus productos.

Para mitigar el gran impacto que la supresión de las ‘cookies’ pueda tener en el mercado de la publicidad digital –que es la principal fuente de ingresos de Google–, la firma confía en su iniciativa ‘privacy sandbox’, todavía en desarrollo y que tiene como objetivo crear unos estándares abiertos que mejoren la privacidad en la red, permitan a los internautas no compartir sus datos o actividades online en la medida de lo posible y, a la vez, sean útiles a los anunciantes para dirigirse a públicos específicos.