«Ante el crecimiento de casos, describimos la covid-19 como una pandemia el 11 de marzo del pasado año, pero el más alto nivel de alarma de la OMS se hizo sonar el 30 de enero», cuando ya se declaró la emergencia internacional, ha subrayado Tedros Adhanom Ghebreyesus en rueda de prensa desde Ginebra.

El director general de la Organizción Mundial de la Salud ha comentado que todavía se está intentando averiguar «por qué algunos países actuaron ante las primeras advertencias pero otros fueron más lentos en reaccionar».

Ha incidido en que en febrero de 2020 la OMS ya daba ruedas de prensa diarias sobre el tema y ofrecía las primeras recomendaciones a gobiernos y personas.

«Continuamos advirtiendo entonces de que el mundo tenía una estrecha ventana de oportunidad para evitar una potencial pandemia», ha lamentado.

«No hay atajos»

El director de la OMS considera que, un año después, «hemos llegado lejos, pero hemos sufrido mucho y hemos perdido a muchos».

Hasta el momento, en todo el mundo se han contabilizado más de 2.600.000 muertes causadas por el nuevo coronavirus, que ha infectado a más de 117 millones de personas, de las cuales más de 93 millones han logrado recuperarse.

Tedros ha indicado también que no se deben perder los progresos en la lucha contra la pandemia y para ello hay que usar «de forma consistente e igualitaria» herramientas como las vacunas o las medidas de prevención.

«Nuestra guía siguen siendo la ciencia, las herramientas y la solidaridad, y no hay atajos en ello», ha resaltado.