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Irán asegura haber evitado un sabotaje contra un edificio de su agencia atómica

Las autoridades iraníes han asegurado haber desarticulado un acto de «sabotaje» contra un edificio de la Organización de la Energía Atómica de Irán (OEAI) en la localidad de Karaj, al norte de la capital, Teherán.

Partidarios de Raisi celebran su victoria en las elecciones. (Mohsen ESMEILZADEH/AFP)
Partidarios de Raisi celebran su victoria en las elecciones. (Mohsen ESMEILZADEH/AFP)

Según las informaciones recogidas este miércoles por la cadena de televisión pública iraní, IRIB, el «intento hostil» se ha saldado sin víctimas o daños materiales, sin que haya más detalles al respecto.

Las autoridades, tras afirmar que han logrado «neutralizar el ataque gracias a los estrictos protocolos de seguridad adoptados recientemente» tras otros actos similares de sabotaje contra instalaciones nucleares del país, han abierto una investigación para esclarecer lo sucedido.

El incidente en el edificio de su agencia atómica, la OEAI, en Karaj (provincia de Alborz, al norte de la capital, Teherán), ha tenido lugar en medio del proceso de negociación en marcha en la capital de Austria, Viena, para el retorno de Estados Unidos al acuerdo nuclear de 2015 y la retirada de sanciones contra Irán.

Irán ha anunciado la retirada de sus compromisos sobre varios de los puntos del acuerdo, lo que ha provocado el temor en el resto de firmantes de un posible colapso del pacto.

Sin embargo, las autoridades iraníes han defendido en todo momento que estos pasos pueden revertirse si Estados Unidos retira las sanciones y vuelve al acuerdo, del que salió de forma unilateral.

Por el momento se desconoce quién está detrás del suceso, que llega cerca de un año después de que la central de Natanz, centro del país, sufriera una explosión, achacada por Irán a las autoridades israelíes.

El apagón dañó cientos de centrifugadoras y fue calificado por Teherán como «terrorismo nuclear».

El jefe saliente del Mossad, Yossi Cohen, reconoció recientemente que Israel habría estado detrás del incidente.

En represalia, Irán empezó a enriquecer uranio a una pureza del 60%, muy por encima del 3,67% que le permite el pacto nuclear de 2015 (JCPOA por sus siglas en inglés) y a un nivel cercano al necesario para producir una bomba atómica.

Además, en noviembre de 2020 se produjo el asesinato cerca de la capital del prominente científico nuclear Mohsen Fajrizadeh.

La victoria de Raisi

El incidente de hoy se produce después de que resultara elegido en las presidenciales del pasado viernes el clérigo ultraconservador y jefe del Poder Judicial, Ebrahim Raisi.

En su primera rueda de prensa como presidente electo, Raisi se mostró partidario de continuar con las negociaciones nucleares en curso en Viena, pero exigió el fin de todas las sanciones estadounidenses y se negó a incluir otros asuntos en disputa como los misiles balísticos.

Por contra, el nuevo primer ministro de Israel, el ultranacionalista Naftali Benet, afirmó el pasado domingo que la elección de Raisi es «una señal» para que las principales potencias mundiales «despierten» y «entiendan con quién están negociando y qué tipo de régimen están eligiendo fortalecer».

Las negociaciones comenzaron el pasado abril entre Irán y el resto de signatarios del JCPOA (Rusia, China, Estado francés, Gran Bretaña y Alemania) y en ellas participa de modo indirecto EEUU.

El objetivo de las conversaciones, que ya han celebrado seis rondas, es encontrar un mecanismo que permita a EEUU regresar al JCPOA, que abandonó en 2018, y a Irán volver a cumplir con sus compromisos.

A la espera de un resultado

El presidente iraní, Hasan Rohaní, ha declarado este miércoles en la reunión semanal del gabinete que las sanciones estadounidenses podrían levantarse "hoy mismo" si hay voluntad de todas las partes.

Por su parte, el jefe de la oficina de Rohaní, Mahmud Vaezí, explicó que se ha logrado un acuerdo para levantar más de un millar de sanciones contra el petróleo, el transporte y las aseguradoras, así como contra «individuos del círculo del líder supremo».

Uno de esos individuos es Raisi, a quien EEUU impuso sanciones en 2019 por ser parte de «los funcionarios no elegidos popularmente que rodean al líder supremo de Irán e implementan sus políticas desestabilizadoras».

Las negociaciones han logrado avances y se espera que en la próxima y séptima ronda, para la que todavía no se ha determinado una fecha, se llegue a una conclusión final.

Al margen de estas conversaciones, el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) negocia con Irán la extensión de nuevo de un acuerdo bilateral para mantener un nivel mínimo de verificación del programa nuclear persa.

Ese acuerdo, inicialmente de tres meses y ampliado en mayo pasado por un mes, expira mañana, sin que por el momento haya trascendido qué va a ocurrir con los límites impuestos por Irán a las inspecciones internacionales.

Anuncian la muerte de cinco «terroristas»

Por otra parte, las autoridades de Irán han anunciado también este miércoles la muerte de cinco «terroristas» que planeaban un ataque antes de las elecciones presidenciales del 18 de junio, en el marco de una operación llevada a cabo en la provincia de Kurdistán.

Según las informaciones ofrecidas por la agencia iraní de noticias Fars, los sospechosos «intentaron infiltrarse para llevar a cabo actos de sabotaje contra la votación en las localidades de Bané y Sarvabad», sin precisar cuándo tuvieron lugar estas operaciones.

Asimismo, ha indicado que los enfrentamientos se saldaron con otros tres sospechosos heridos y con la incautación de munición y equipamiento, sin decir tampoco a qué grupo pertenecerían las víctimas.

Otras versiones

Por contra, la Red de Derechos Humanos del Kurdistán (KHRN) informó la semana pasada de la muerte de cuatro milicianos kurdos a causa de un ataque artillería por parte de la Guardia Revolucionaria iraní en la aldea de Sarvabad durante la jornada del 15 de junio.

En la zona operan las Fuerzas de Defensa de Kurdistán Oriental (YRK) –brazo armado del Partido por una Vida Libre para el Kurdistán (PJAK)–.

El PJAK es un grupo ilegalizado en Irán que aboga por el autogobierno de los kurdos iraníes y que está vinculado con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

Pese al alto el fuego alcanzado en 2011, ambas partes se acusan mutuamente regularmente de incumplirlo.