Hace unos días, las jugadoras de la Association Sportive Bayonne (ASB) de Elite 1, máxima categoría del rugby francés, publicaron una carta en la que anunciaban su renuncia a disputar el encuentro que tenían programado frente al Stade Toulousain. Los motivos para este plante eran la falta de jugadoras –las que se marcharon al final de la campaña no fueron debidamente reemplazadas, y las lesiones no han ayudado– y falta de recursos humanos y materiales para entrenar.

El club labortano ha analizado la decisión, y su junta directiva ha anunciado que no les queda más remedio que renunciar a seguir compitiendo en Elite 1. Su presidente, Gilles Peynoche, lo explicaba este miércoles en la emisora France Bleu Pays Basque. «Es una decisión de sentido común. Tenemos unas 50 jugadoras, pero 10-12 están lesionadas, y por normativa tenemos que tener dos equipos», ya que es obligatorio un filial senior.

Peynoche subrayó que la ASB lleva 30 años trabajando por el rugby femenino y que seguirá manteniendo su segundo equipo. «Siempre tendremos chicas en la ASB y el proyecto siempre será evolucionar al mejor nivel», indicó.

Frente a posibles críticas, el presidente del club labortano asumió que estas pueden llegar, pero consideró que antes de repartir culpas había que «estar en el interior del club, echar una mano con la venta de bebidas o bocadillos, con la colada. Somos un club modesto, en chicos jugamos en Federale 3 (quinta división), tenemos un nivel amateur y somos voluntarios. A día de hoy, la verdadera pregunta que surge es ¿tenemos los medios para competir con Toulouse, Montpellier, Blagnac y existir en Elite 1?».

Preguntado por si esta decisión no tenía que haberse tomado antes de empezar la temporada, Peynoche asume que probablemente sí, pero que en su día se acordó con el cuerpo técnico y las jugadoras –conocidas como Les Neskak– seguir adelante. «Realmente pensamos que estaríamos justos de gente con todas las salidas que tuvimos, pero que podríamos mantenernos en la categoría».

Reunión convocada por el Ayuntamiento

La crisis de la ASB salpica al Ayuntamiento de Baiona y a la Federación Francesa de Rugby (FFR). El Consistorio, que aporta 66.000 de los 300.000 euros de presupuesto del club, ya ha convocado una reunión con la dirección del ASB, el cuerpo técnico, las jugadoras, el Aviron Bayonnais (principal club de la ciudad) y la FFR. El objetivo es «definir las condiciones que permitan a la ASB continuar su desarrollo y su compromiso a favor del deporte femenino». El encuentro tendrá lugar el martes que viene, apunta France Bleu.

También la FFR ha comenzado a mover sus hilos por su cuenta. No en vano, le corresponde decidir si acepta la renuncia o trata de poner medios para que esta no se convierta en una realidad.