La Comisión de Igualdad del Congreso español ha aprobado el dictamen de Ley de Garantías de la Libertad Sexual, conocida como ley de ‘solo sí es sí’. Lo ha hecho en una sesión marcada por la retirada de una enmienda sobre la prostitución presentada por el PSOE.

Se trataba de un texto que buscaba endurecer la tercería locativa –el lucro por alquilar un espacio donde se prostituye a una persona–, incluyendo un «castigo al proxenetismo en general», ampliando las penas de prisión de 1 a 3 años y multas de 12 a 24 meses.

Las formaciones que propiciaron la investidura de Pedro Sánchez, e incluso el grupo de Unidas Podemos, una de las dos patas del Ejecutivo español, habían mostrado su postura contraria a la enmienda, por considerar que la prostitución y la trata deben ser reglados en una norma específica.

De hecho, formaciones como Junts, ERC, PDeCAT, EH Bildu o PNV han pactado con el Ministerio de Igualdad una enmienda para que las medidas incluidas en la ley sobre tercería locativa se eliminaran y fueran abordadas en la ley de trata que está elaborando el Gobierno español.

Tenso debate sobre el objetivo de la ley

Cabe señalar que el PSOE ha anunciado la retirada de la enmienda minutos antes de comenzar el debate en el seno de la Comisión de Igualdad, donde Bel Pozueta, de EH Bildu, ha insistido en que el debate sobre la prostitución «necesita de un espacio y de un tiempo amplio con la participación de las mujeres que ejercen la prostitución».

En el mismo sentido se ha pronunciado el jeltzale Joseba Agirretxea, quien ha remarcado que la idea de ‘solo el sí es sí’ «debería haber primado a la hora de haber hecho esta ley. Ese y no otro debería ser el criterio que nos uniera a todos y todas a la hora dar una respuesta a un clamor popular».

«Pero la realidad ha sido otra, y alguien, o algunos, pensaron que además del ‘sí es sí’ tenían que incluirse otros elementos que nada o poco tenían que ver con eso», ha añadido antes de insistir en que «el tema de la prostitución por compleja, por sensible y por suficientemente importante, merece un espacio de debate propio y una legislación propia».

Desde ERC, Pilar Vallugera ha censurado que «hemos entrado en una batalla campal entre feministas por un tema que no tenía nada que ver con el principio básico de la ley, que era defender a las mujeres y establecer las garantías para que su libertad sexual fuera respetada siempre y en todas partes».

Y la portavoz de En Comú Podem del Congreso Aina Vidal ha reprochado al PSOE «utilizar la prostitución para romper consensos». «Hoy el PSOE ha hecho lo mismo que lleva años haciendo en los movimientos feministas: utilizar la prostitución para romper consensos. Pero hoy no les ha salido bien. La ley del Solo Sí es Sí saldrá adelante», ha aseverado.

Renuncia a algo «irrenunciable»

Pese a retirar su enmienda, Laura Berja, del PSOE, ha defendido la abolición de la prostitución, algo «irrenunciable», y ha cargado contra los grupos de izquierda. «Quien pone en peligro una ley es quien amenaza con votar en contra», ha apuntado.

Ha destacado que «la ley del ‘sí es sí’ es un compromiso del PSOE y contará siempre con el PSOE. Combatir la violencia contra la mujeres está en el corazón de nuestra agenda política y por eso, y por responsabilidad, vamos a posibilitar que se apruebe el dictamen, retirando la enmienda, pero anunciando que mañana a primera hora presentamos una propoisición de ley con el mismo texto».

Rechazo de la derecha

Como era de esperar, el cambio de postura del PSOE ha permitido la aprobación del dictamen, que deberá pasar por el pleno del Congreso, donde se encontrará con el rechazo de la extrema derecha española. Basta con señalar que durante el debate de este miércoles, Lourdes Méndez, de Vox, ha señalado que la ley del ‘solo el sí es sí’ es «discriminatoria».

«La lucha contra todo tipo de violencia no se realiza vulnerando derechos constitucionales, introduciendo la perspectiva de género, abundando en la afirmación absurda de sociedad machista, o en su feminismo enfermo», ha indicado la representante ultraderechista, que ha dicho que serán sospechoso «todos aquellos hombres que suban en un ascensor sin un testigo». A su juicio, la ley del ‘solo sí es sí’ genera «confusión».