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Desaparece del castillo de Montjuïc la réplica de la senyera colocada por Lluís Companys

La Comissió de la Dignitat ha denunciado el «robo» de la bandera catalana que ondeaba en el castillo de Montjuïc de Barcelona. La senyera, de 8 metros de largo y cinco de ancho, fue izada en 2011 en recuerdo de la colocada por la Generalitat de Lluís Companys en 1936.

Imagen de la senyera de Companys en el castillo de Montjuïc, ahora desaparecida.
Imagen de la senyera de Companys en el castillo de Montjuïc, ahora desaparecida. (Maria Rosa FERRE | WIKIMEDIA COMMONS)

La bandera catalana que ondeaba en el castillo de Montjuïc de Barcelona en recuerdo de la que puso el president Lluís Companys en 1936 ha desaparecido. Así lo ha denunciado en su cuenta la Comissió de la Dignitat, entidad impulsora de la restitución en 2011 del emblema nacional en uno de los baluartes del castillo, la conocida como senyera de Companys.

El robo se habría producido el pasado 24 de junio, casi 86 años después de la primera izada de la bandera, el 23 de agosto de 1936, en un acto encabezado por el president Companys. Más de un mes después del robo, la bandera no ha sido restablecida, aunque según apunta ‘El Punt Avui’ tanto los responsables del castillo como el Ayuntamiento de Barcelona está al corriente de su falta. Ambas partes hablan de su «pronta restitución», aunque ésta todavía no se ha producido.

El 15 de junio de 2008 tuvo lugar una gran fiesta popular para celebrar su recuperación para usos civiles, sociales y culturales, con actos de homenaje al president Companys y al pedagogo Francesc Ferrer i Guàrdia, ambos fusilados en el castillo.

De este modo se inició un primer periodo de rehabilitación de salas y espacios polivalentes del castillo en el marco del Plan Director del Castillo de Montjuïc de abril de 2010. El 15 de octubre de 2011, 75 años después del fusilamiento del president Companys, tuvo lugar otro gesto en este sentido, y tanto la Generalitat como el Ayuntamiento de Barcelona recuperaron la bandera catalana que había izado el president en 1936, cuando recuperó el castillo para la ciudad.

Para ello, se colocó una senyera de 8 metros de largo por cinco de ancho, las medidas aproximadas de la bandera original, sobre un mástil de 15 metros de altura. Ahora, misteriosamente el emblema ha desaparecido sin que aparentemente nadie advirtiera su ausencia, por lo que la Comissió de la Dignitat ha pedido que el Ayuntamiento «haga pública la investigación de cómo se puede ‘robar’» esa bandera «de un castillo cerrado y en una zona de seguridad militar».

La senyera de Companys

El 23 de agosto de 1936, día del primer izado de la bandera, el Comité de Milicias Antifascistas tomó posesión del castillo y, con la voluntad de hacer visible el cambio de manos –hasta entonces el castillo pertenecía al Ejército español–, llevó a cabo un acto simbólico en el que se sustituyó el nombre del patio de armas por el de ‘Plaza de la Libertad’, y en cuya entrada se colgó un cartel con el lema ‘Orden, serenidad y disciplina’.

Con la entrada de las tropas fascistas, el castillo se convirtió en un lugar conmemorativo de los vencedores en el que se llevaron a cabo celebraciones religiosas, así como en un escenario para los consejos de guerra, siendo el caso de encarcelamiento y ejecución de mayor transcendencia política el del president Lluís Companys.

El 13 de agosto de 1940, las autoridades españolas ordenaron arrestarlo en el Estado francés, en la parte ocupada por el ejército alemán, y de allí fue conducido a la prisión parisina de La Santé, desde la que fue entregado al régimen franquista a través de Euskal Herria (así se recordó todo ello en Irun en 2020).

Tras pasar unos días en la Dirección General de Seguridad de Madrid, fue trasladado a Barcelona e ingresado en el castillo de Montjuïc, donde se mantuvo recluido y aislado de los demás presos, en las celdas del sacerdote castrense situadas en el patio de armas del castillo.

El 3 de octubre se inició un proceso judicial que concluyó en tan solo diez días, de manera que el 14 de octubre de 1940 tuvo lugar un consejo de guerra sumarísimo de menos de una hora que acabó con la sentencia de pena de muerte. El 15 de octubre a las 06.00 fue fusilado en el foso de Santa Eulàlia, quedando su figura para siempre unida a la historia del castillo.