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Donostia recuerda a las víctimas del franquismo 86 años después de la toma de la ciudad

Las víctimas del franquismo en Donostia han sido homenajeadas por el Ayuntamiento y por la Asociación de Víctimas del Genocidio en el monumento de la calle Ijentea y en el mauselo franquista del cementerio de Polloe con motivo del 86 aniversario de la entrada de las tropas fascistas en la ciudad.

El alcalde Goia, la consejera Artolazabal y la directora de Gogora, Aintzane Ezenarro, entre otros, junto al mausoleo de Polloe.
El alcalde Goia, la consejera Artolazabal y la directora de Gogora, Aintzane Ezenarro, entre otros, junto al mausoleo de Polloe. (Jon URBE | FOKU)

Coincidiendo con el 86 aniversario de la entrada de las tropas franquistas en Donostia, este martes a mediodía se ha recordado a las víctimas del fascismo en la ciudad en el monumento situado en la calle Ijentea.

El acto ha tenido lugar ante la escultura ‘Dual’, de los artistas Amaia Mateos y Tomás Villanueva, que representa la bahía de La Concha, el río Urumea y la playa de La Zurriola sobre una gran plancha de acero con 400 agujeros que recuerdan al mismo número de personas asesinadas en la ciudad por el franquismo.

El alcalde, Eneko Goia, ha presidido el homenaje, que ha comenzado pasadas las 12.00 horas en la calle Ijentea y que ha contado con la asistencia de toda la Corporación donostiarra, además del diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y de la directora del Instituto Gogora, Aintzane Ezenarro. También han asistido miembros del sindicato LAB.

El acto ha arrancado con la interpretación de varias piezas conmemorativas por parte de la Banda Municipal de Txistularis, tras la que unos jóvenes han interpretado una coreografía, al término de la cual los asistentes han insertado flores en los agujeros de la escultura ‘Dual’.

Unos minutos más tarde, los participantes han dado por concluido el homenaje con aplausos, tras lo que Goia ha recordado, en declaraciones a los periodistas, que este «es un día muy señalado para la ciudad porque el 13 de septiembre de 1936 la mitad de la población tuvo que abandonarla» y Donostia «perdió la libertad y la democracia».

«Además de las personas que pagaron con su vida lo que sucedió entonces –ha recordado el primer edil–, se inició una larga noche negra que hoy no queremos olvidar y por ello esta jornada es para tener presentes a todos aquellos que sufrieron durante tanto tiempo, con un mensaje proyectado haca el futuro».

«Y más en un contexto como el actual en el que vemos algunos comportamientos y la reproducción de algunos esquemas que creemos que están absolutamente superados y que no se deben repetir de ninguna de las maneras», ha añadido.

Mauselo franquista en Polloe

Ya por la tarde, en el cementerio de Polloe, el Gobierno de Lakua y el Ayuntamiento donostiarra han informado de que «resignificarán» el mausoleo franquista en un lugar de memoria de los combatientes republicanos inhumados allí.

En este acto han participado, entre otras, la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, y Lourdes Herrasti, antropóloga de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, así como el alcalde donostiarra y la directora del Instituto Gogora.

Ante varios familiares de las víctimas, los representantes institucionales han explicado las actuaciones que se van a llevar a cabo en este lugar para «dignificar la memoria de los gudaris y milicianos inhumados en el mausoleo franquista de ese mismo cementerio, erigido para albergar y honrar restos de combatientes sublevados».

Goia ha anunciado que el Ayuntamiento colocará una escultura en memoria de las víctimas: «Donostia quiere ir recuperando espacios de memoria en la ciudad, y en esta línea cobra todo su sentido la resignificación del mausoleo de Polloe».

La decisión ha sido tomada después de acordarla con las propias familias de las víctimas, en una reunión que se celebró a finales de julio, y tras informarles de la investigación histórica y la prospección del estado de los restos realizada por Aranzadi.

Identificación de los restos inviable, pero se conocen sus nombres

Herrasti, responsable de este proyecto, ha expuesto las conclusiones de la investigación histórica que ha permitido conocer los nombres de estas personas y también los motivos por los que se ha concluido la «imposibilidad de identificar los restos».

Ha explicado que la práctica totalidad del suelo del mausoleo se encuentra ocupada por restos óseos y se pueden observar diferentes formas de inhumación, fruto de las diferentes fases en las que ocurrieron los traslados de restos al lugar.

«En la actualidad, como consecuencia de la humedad, la totalidad de los féretros de madera que albergaban originalmente los restos se han destruido y se han ido mezclando los restos superpuestos. Eso hace que se considere inviable poder establecer las identificaciones», ha señalado.

Al menos sí se han podido documentar los restos de los 17 combatientes republicanos que fueron inhumados en este mausoleo construido en 1939.

Todos ellos murieron, entre el 22 y el 25 de julio de 1936, en los combates que precedieron a la ocupación militar de la capital donostiarra por parte de los fascitas sublevados.

Se trata de Pedro Arriola San Pedro, Severiano Asarta Imaz, Narciso de Santos Herrero, Lorenzo Echarri Isasa, Marcos Gallurralde Elejalde, Camilo Ibáñez Azcoaga, Manuel Inoriza Sagarminaga, Francisco Irazabal Sáez, Alvaro Izurza Pascual, José Lage Iza, Luis Larrea López de Ipiña, Ambrosio Narvaiza Sarasqueta, Pedro Olmedo Paumero, Clemente Queipo, Eusebio Serrano Alvarez, Benito Uranga Balanzategi y Eloy Zufiaurre García.

Verdad, justicia y reparación

También por la tarde y en el monumento de la calle Ijentea tuvo lugar el acto popular, convocado por la Asociación de Víctimas del Genocidio, que estima en 400 los donostiarras que murieron o desaparecieron por la acción fascista», según informa ‘Irutxuloko Hitza’.

«Como todos los años, reivindicamos verdad justicia y reparación. De hecho, el Estado español nos niega estos derechos y que tenemos que ir a la Justicia argentina o a la ONU para reclamarlos», destacó este colectivo.

«Es necesario defender la memoria de las víctimas del franquismo y proteger y mantener vivos los valores culturales e idológicos de quienes lucharon contra los militares fascistas», añadieron.