La familia de Mahsa Amini, la joven kurda de 22 años que falleció el 16 de setiembre en Irán mientras estaba bajo custodia policial por llevar mal puesto el velo, ha denunciado que todavía no ha tenido acceso a los expedientes oficiales del caso.

El padre, Amjad Amini, ha declarado que el presidente iraní, Ebrahim Raisi, no les «consoló en absoluto»: «Solo llamó y dijo que harían un seguimiento».

«Nadie nos está dando una respuesta sobre la causa de la muerte de mi hija», ha asegurado Amini a los medios locales estas últimas horas.

Además, ha explicado que ha intentado varias veces recibir explicaciones del médico forense y las autoridades correspondientes. «Pero no me dieron ninguna respuesta, simplemente me dicen que espere dos o tres semanas más», indica.

«La Policía de la moral debe estar disponible y debemos tener derecho a tener acceso permanente a sus archivos», remarcó la defensa de la familia de Amini, a quienes las autoridades judiciales le prometieron que el caso «se manejará con cuidado», así como la posibilidad de que los forenses y el equipo médico designado por la familia estén al tanto de la investigación y de posibles problemas.

La muerte de la joven kurda ha provocado una ola de indignación tanto en una parte de la sociedad iraní, como de forma más unánime a nivel internacional. Al menos 83 personas han muerto por la represión.

Ali Jamenei critica las protestas «planeadas»

El líder supremo de Irán, Ali Jamenei, ha afirmado este lunes, en sus primeras declaraciones desde la muerte hace dos semanas de Amini, que el suceso fue «desolador», pero calificó las protestas que se han desencadenado por ello como «no normales» y «planeadas».

«La reacción adecuada no era que algunos crearan inseguridad, incendiando mezquitas, bancos y vehículos particulares», ha afirmado el líder en una visita a la Universidad de Oficiales de las Fuerzas Armadas. Jamenei ha asegurado que las protestas estaban «planeadas» y ha señalado directamente a EEUU e Israel. «Declaro públicamente que los recientes disturbios y agitaciones fueron una conspiración diseñada por EEUU, el usurpador y falso régimen sionista, sus mercenarios y algunos iraníes traidores que viven en el extranjero y les ayudaron», ha apuntado el religioso. «Quieren un Irán como el de la era Pahlavi (el último sha), que obedecía sus órdenes como una vaca lechera. Para ellos no se trata de la muerte de una mujer joven o el velo», ha añadido.

Además, ha defendido a la Policía y a los basijis (milicias paramilitares leales al régimen iraní) «por hacer su deber», aunque la ONU afirmó que llegaron a usar munición real para reprimir las protestas. «La Policía, los basijis y el pueblo de Irán son los oprimidos», dijo.

El líder religioso también ha afirmado que hay políticos estadounidenses que comparan las protestas con la caída del Muro de Berlín, lo que deja claro «lo que está ocurriendo».

Las Universidades cierran sus puertas

La Universidad Tecnológica de Sharif, una de las principales de Teherán, ha anunciado este lunes que vuelve a suspender las clases presenciales y las enseñanzas serán ‘online’ después de que anoche fuese el escenario de protestas para denunciar la muerte de Amini.

Según el relato de la Universidad, a primera hora de la tarde comenzó una manifestación y horas después apareció un contingente de las fuerzas de seguridad, sin uniformes, en furgonetas. «Dispararon bolas de pintura desde las verjas hacia dentro de la universidad», detalla. Las protestas se alargaron hasta más allá de la media noche.

Las principales universidades del país recuperaron este sábado las clases presenciales que fueron suspendidas una semana antes por las protestas por Amini. Pero durante el sábado y el domingo se produjeron protestas en varias universidades, además de en Sharif.

En otro importante centro universitario, los estudiantes han estado protestando en los espacios abiertos, golpeando en suelo con los pies y elevando el puño al aire, en movilizaciones pacíficas, con llamamientos a un cambio de sistema, según a Efe una fuente educativa.