Ramón Sola

Solidaridad con Jauregi ante el Consulado español, con sus objetos personales y una carta

La plataforma We Love Jaione ha reivindicado la puesta en libertad de esta presa preventiva vasca afincada en Gante ante el Consulado español en Bruselas, adonde llevaron una carta –que no quiso recoger el embajador- y enseres personales que no pueden hacerle llegar en prisión.

Vecinos y amigos de Jauregi, ante el Consulado español en Bruselas.
Vecinos y amigos de Jauregi, ante el Consulado español en Bruselas. (We Love Jaione)

Un par de semanas después de que el Tribunal de Gante rechazara el intento de abrir una nueva imputación contra Jaione Jauregi, la plataforma que respalda su causa desde esa ciudad ha tocado una nueva puerta: la del Consulado español en Bruselas.

Según han explicado a NAIZ, el viernes pasado acudieron a la institución española en la capital belga con una carta de denuncia de su situación, dado que acumula ya dos años en prisión preventiva y sin juicio a la vista. Sin embargo, el embajador español, Alberto Antón Cortés, se negó a recogerla. En la misiva se recuerda que Jaione Jauregi llevaba 17 años trabajando como cocinera en Gante con total normalidad, hasta que han llegado estas embestidas judiciales españolas que forzaron su entrega y encarcelamiento en noviembre de 2020.

Además, sus vecinos y amigos llevaron a la Embajada objetos personales de Jauregi, como puzzles, «que se nos ha impedido enviarle durante estos dos años».

En paralelo, trasladaron una demanda: «Que Jaione sea trasladada a Gante para esperar el juicio. No puede ser tratada como terrorista».

Apelación también al Estado belga

Estas iniciativas se complementan con el dossier presentado por la plataforma, que repasa todos los intentos españoles de ligar a Jaione Jauregi con ETA e imputarle atentados ocurridos hace más de 40 años, siempre en base a declaraciones realizadas bajo tortura. «El Gobierno español es el principal responsable de todo esto, pero Bélgica también está involucrada», exponen.

«Desde la ley de 2003, ya no es siquiera el ministro de Justicia quien ordena la entrega dentro de la UE, sino el juez. Pero esto no exime a los políticos de responsabilidad. Las autoridades políticas de Bélgica no pueden permanecer conscientemente ciegas. Denuncian a Hungría y Polonia porque los jueces no son suficientemente independientes, sino designados políticamente y supervisados, pero actúan como si no pasara nada cuando se trata de la Justicia española y el proceso judicial», subraya We Love Jaione.