Marcel Pena

«Bulos» y más debate, las dos caras de la recta final para la tramitación de la Ley Trans

La conocida como «Ley Trans» será tramitada próximamente en el Congreso español y para desmentir algunos «bulos» en torno a la norma, este viernes ha tenido lugar una charla en Bilbo con miembros de Naizen y la Plataforma Trans. Desde un sector del feminismo, sin embargo, se exige más debate.

Charla ‘Ley Trans: desmintiendo bulos’, este viernes en Bilbo.
Charla ‘Ley Trans: desmintiendo bulos’, este viernes en Bilbo. (Marisol RAMIREZ | FOKU)

La Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI, más conocida como «Ley Trans», encara la recta final de su tramitación en el Congreso español entre un tira y afloja protagonizado por Unidas Podemos y el PSOE, que no es más que el reflejo de un debate que también se da en la calle.

Para aclarar algunas dudas sobre la ley que se votará próximamente en Madrid, este viernes se ha celebrado en Bilbo la charla ‘Ley Trans: desmintiendo bulos’, organizada por Alternatiba. Como ponentes han participado Bea Sever, portavoz de Naizen, y Mar Cambrolle, portavoz de la Plataforma Trans estatal. Este acto, moderado por María del Río, doctora en Derecho Penal y militante de Alternatiba, ha sido el último de un ciclo de ponencias que también han tenido lugar en Gasteiz, Errenteria e Iruñea.

En primer lugar ha tomado la palabra Sever, quien ha avisado que no puede hablar «por las personas trans adultas; he venido a hablar por mi hijo y otras familias en la misma situación». Sobre el punto estrella de la charla, la «Ley Trans», la portavoz de Naizen ha asegurado que en este momento no se alegraría por la aprobación de la norma en Madrid. «Ahora mismo, no quiero que salga. Es un retroceso abismal para la infancia», ha explicado, debido a que incluye una enmienda del PSOE que eleva hasta los 16 años la edad mínima para cambios de nombres. Actualmente se están dando cambios de nombres en menores de 11 o 12 años, ha detallado, e incluso se han dado casos de este proceso y mención de sexo «con cinco años» en el registro de Iruñea.

Server también ha aludido a cómo repercute el «clima» político en las vidas de los menores, viéndose aumentado el «nivel de agresividad» y, a su vez, el «sufrimiento» de los niños que no entienden la razón de esos «ataques».

Por su parte, Cambrolle ha recordado que Andalucía fue la primera región europea que introdujo el término «autodeterminación de género», solo detrás de Argentina, que lo había establecido en 2012. «La autodeterminación es un principio jurídico que ha adquirido rango de derecho fundamental y quiere reconocer a las personas trans como sujetos de derecho y no como objetos de la medicina», ha reivindicado.

La activista también ha cargado contra las feministas que abogan por un debate más amplio sobre la Ley Trans, liderado en el seno del PSOE por la ex vicepresidenta española Carmen Calvo y la miembro del Consejo de Estado Amelia Valcárcel, de quien ha dicho, jugando con su apellido, que «debería ir a la cárcel». «Zapatero demostró con el matrimonio igualitario que estaba en el lado correcto de la historia. Sin embargo, este señor [en alusión a Pedro Sánchez] se deja llevar por cuatro mujeres locas –lo digo así porque es una expresión– que ejercen un abuso de poder. El PSOE ha perdido el norte. Ya no les pido que se bajen del autobús de la transfobia, es que lo están conduciendo», ha expresado Cambrolle.

Un texto legislativo «complejo»

Desde algunos espacios feministas se ha denunciado el «paripé» que, a su juicio, supone la tramitación de la Ley Trans. Concretamente, la Alianza Contra el Borrado de la Mujeres considera que la ponencia que se celebró este jueves en el Congreso español «es un nuevo episodio de fingimiento y simulación», al entender que «uno de los textos legislativos mas complejos en términos de conceptualización jurídica que se han presentado en esta legislatura» se «ventiló» en una tarde.

A esto se añade la crítica al PSOE por haberse sumado «a la decisión de vetar la comparecencia de expertos y expertas de diferentes ramas profesionales», algo que consideran «antidemocrático» y que pone de manifiesto «el miedo del Gobierno a que la sociedad española conozca las implicaciones ciertas de la aprobación de dicha ley».

Entre las denuncias de grupos como Contra el Borrado de las Mujeres se encuentra que se trata de «una ley Queer que reemplaza el sexo por los estereotipos de género, el sexo como un constructo asignado al nacer»; perjudica a lesbianas, gays y bisexuales en tanto «se niegan las orientaciones homosexuales si se niega la validez del sexo priorizando la identidad sentida»; se perjudicará a las mujeres en el deporte femenino o que «un varón que pasa a ser legalmente una mujer se beneficiará de todas las medidas de acción positiva para mujeres».

En unos términos similares se ha expresado la Agrupación de Madres de Adolescentes y Niñas con Disforia Acelerada (AMANDA), que ha calificado de «vergonzoso» que no se vayan a realizar comparecencias en la tramitación parlamentaria de la Ley Trans y ha advertido de que «no es ético» legislar de espaldas al conocimiento científico y a la población.

Para esa asociación, la propuesta legislativa «se aleja de las necesidades reales de la infancia, adolescencia y juventud, obvia el fenómeno creciente de la disforia de género de inicio rápido y las destransiciones».