A mediados de los setenta, la resplandeciente estrella del político británico Jeremy Thorpe vivió su declive a resultas de un escándalo que torpedeó sus aspiraciones.

Cumplidos los 46 años, lideraba el Partido Liberal desde ocho años atrás y su nombre aparecía en los primeros puestos de las quinielas que lo señalaban como futuro primer ministro. Sin embargo, todo cambió por completo cuando temeroso de que su secreto fuese revelado y ello impidiera su acceso al número 10 de Downing Street, optó por ejecutar una solución drástica que consistió en ordenar el asesinato de su amante, Norman Scott.

Para llevar a cabo su plan, Thorpe contó con la ayuda de tres hombres, pero el resultado fue catastrófico. El sicario encargado de ejecutar a su amante disparó su arma  pero falló su tiro y acabó con la vida de su gran danés, Rinka. En su siguiente intento, su arma se trabó y la víctima pudo escapar con vida.

Al poco tiempo, los titulares de prensa británicos se hicieron eco de este asunto truculento que acabó siendo considerado un «escándalo muy inglés» debido a que fueron muchas las personas que, más allá del objetivo humano, nunca perdonaron el asesinato de la desdichada Rinka.

Scothland Yard capturó al asesino material y todo el asunto desembocó en una serie de acontecimientos que cobraron forma definitiva en 1976, cuando Thorpe fue obligado a renunciar a su liderato dentro del partido y tuvo que prepararse para el que sería denominado como «el juicio del siglo», el cual se escenificó en 1979, pocos días después de que Margaret Thatcher asumiera su cargo como primera ministra.

Stephen Frears, Hugh Grant y Ben Whishaw

Estos son los elementos que maneja ‘A Very English Scandal’, la miniserie dividida en tres partes de la BBC que podrá ser visionada en el servicio Prime de Amazon y que llega con unas excelentes críticas.

Detrás de la producción se encuentra Stephen Frears en la dirección -autor de obras tan relevantes como ‘Ábrete de orejas’, ‘Las amistades peligrosas’, ‘The Queen’- y con Russell T. Davies, uno de los guionistas más célebres de Gran Bretaña, el cual se basó en el el libro homónimo de John Preston.

Su lujoso reparto está liderado por Hugh Grant, encarnando a Jeremy Thorpe, y Ben Whishaw haciendo lo propio con el rol de Norman Scott. Los no menos excelentes Alex Jennings y Patricia Hodge se sumaron a este proyecto en el que se subraya, sobre todo, el cinismo social, la homosexualidad como algo ilegal, el sensacionalismo, la trastienda política de las altas esferas y el control del relato.