Marce García Carpio
Miembro de la Comisión de Vivienda de Stop Desahucios de Euskadi y Estatal

La okupación y lo que realmente se esconde tras la campaña mediática y política actual

Aunque soy licenciado en Derecho, trabajo para denunciar estas injusticias y si estuviera la situación de las familias que defiendo, okuparía con orgullo y dignidad una vivienda vacía de los bancos y fondos buitre que nos las arrebataron.

Estimado lector que se preocupa de informarse correctamente antes de valorar lo que sucede a su alrededor:

El objetivo de la presente es ofrecerle una visión diferente de la que le están mostrando ciertos medios de comunicación, sobre lo que antes era un problema y que, dichos medios este verano están convirtiendo, junto a la pandemia, en «el problema» de este país.

Se trata del problema de la okupación y esperamos que, después de leer esto, comprenda cuál es nuestra postura ante la misma y entienda los verdaderos motivos que se esconden detrás del bombardeo mediático que estamos viendo estos días sobre este tema y las peligrosas consecuencias a la que nos enfrentamos.

Comenzaremos la explicación diciendo que a día de hoy es un hecho probado que, cientos de miles de familias a las que defendemos, fueron injustamente desahuciadas de sus viviendas, destrozando sus vidas, usurpando y okupando sus viviendas de forma violenta por la policía, sin alternativa habitacional y con la connivencia tanto de los Jueces como de los Políticos de este país.

Años de lucha, injusticias y sufrimiento han probado sobradamente a día de hoy que estas miles de familias fueron expulsadas de sus casas por impagos mínimos de entre 1 y 3 cuotas (y la prueba de ello es que hoy día la Justicia Europea ha obligado a España a incrementar estos impagos hasta doce mensualidades evidenciando la ilegalidad anterior) y que, además de esto, han comprobado posteriormente que, si tanto bancos como jueces y gobiernos de este país hubieran realizado bien su trabajo cumpliendo las directivas europeas contra los abusos en los contratos, estos desahucios no solo, se habrían evitado, sino que los bancos les tendrían que devolver miles o decenas de miles de euros como consecuencia de las innumerables cláusulas abusivas que inundaban sus hipotecas.

Y digo con certeza que en la mayor injusticia y vergüenza de la democracia de este país, fueron partícipes y responsables, primero los bancos por introducir todo tipo de abusos en nuestras hipotecas y estafarnos miles de millones con ellas, luego los sucesivos gobiernos y el Banco de España, que ni supervisaron ni vigilaron ni castigaron a estos bancos cuando se evidenciaron los abusos y por último, la justicia o más bien, injusticia de este país con el ilustre Tribunal Supremo a la cabeza, que cuando tuvo que elegir entre la vida de miles de familias o los beneficios de los bancos, ya sabemos por quién se inclinó, siendo vergonzosamente corregido hasta tres veces (y seguramente queda alguna más) por el TJUE.

Pero para ahondar más en la injusta crueldad que sufrieron estas familias, además de perder su vivienda, tuvieron que ver cómo quedaban como deudores perpetuos por intereses de demora y costas judiciales abusivas y porque el banco además hacía el negocio del siglo con su vivienda, adjudicándosela en subasta por la mitad de su valor y debiéndole tú, todavía la otra mitad.

¿Cree usted que a día de hoy esta gran vergüenza se ha solucionado adecuadamente y revertido el gran daño causado por destrozar la vida de estas familias? ¿Cree usted que alguno de los responsables de todo este sufrimiento infringido a las familias han pedido públicamente perdón a los afectados?

No solo no lo han hecho, sino que han seguido hundiendo más y más a las familias, que veían con desolación que su casa era regalada a los fondos buitre por los bancos por menos de lo que ellos le debían, o permanecía vacía mientras a ellos nadie les ofrecía una alternativa habitacional.

Pero por si todo este castigo e injusticia no era suficiente, usted querido lector y todos los ciudadanos de este país hemos tenido que asistir perplejos a que un gobierno indigno y corrupto, cuyos tejemanejes junto a otros Partidos, en los consejos de administración de las cajas de ahorro producían unos agujeros milmillonarios, descaradamente tapasen con dinero público de nuestros impuestos, jubilaciones, sanidad, educación y demás servicios públicos, estos agujeros, para, a continuación, regalar esas cajas ya saneadas a los bancos sin pedir nada a cambio ni tratar de recuperar ese dinero, que los bancos admiten abiertamente que no nos van a devolver.

¿Qué más tenemos que soportar para reaccionar? ¿usted lector, qué haría en esta situación?

Yo, aunque soy licenciado en Derecho, trabajo para denunciar estas injusticias y si estuviera la situación de las familias que defiendo, okuparía con orgullo y dignidad una vivienda vacía de los bancos y fondos buitre que nos las arrebataron y que, considero que una gran parte de ellas, nos pertenecen como compensación por el rescate.

Por estos, creo que más que sobrados motivos, defiendo el incumplimiento de lo que la Ley califica como delito de usurpación, aún siendo licenciado en Derecho. Porque lucho contra la injusticia y contra las leyes injustas que criminalizan la pobreza sin analizar la situación que hay detrás de las familias y aquí entramos en nuestra postura respecto a la okupación, para decir que, obviamente hay que denunciar y expulsar lo antes posible a las mafias, a los delincuentes, a los caraduras y a los que no respetan las normas básicas de respeto y convivencia que rigen nuestra sociedad y que okupan viviendas de particulares, sean habituales o segundas residencias.

Pero con la misma claridad y rotundidad, asimismo decimos que no solo defendemos la Okupación de viviendas vacías de los bancos, fondos buitre, Sareb y los edificios abandonados, sino que nuestra forma de okupar ha sido pública, llamada "Obra Social de la PAH" y recogida en un manual disponible hasta ahora en nuestra web y que es un modo de denuncia social de defensa de las víctimas de la estafa inmobiliaria y de que no son delincuentes sino familias que buscan solo un techo de los millones vacíos que existen en España.

Si todavía sigo captando su atención querido lector, una vez explicada claramente nuestra postura así como los motivos en los que se sustenta la misma, paso a ofrecerle un poco de luz sobre por qué usted está asistiendo a un bombardeo mediático este verano por parte de determinados medios con un claro sesgo ideológico, a los que se están uniendo también otros por el sensacionalismo de las noticias, sobre el problema de la okupación, lo que se esconde detrás de esta maniobra mediática, los motivos de la misma y los peligros que conlleva.

El fenómeno de la okupación no es un problema reciente, aunque, como hemos visto en la explicación anterior, se ha visto agudizado con la crisis y el aumento de la pobreza en España, pero todos lo veíamos más o menos en nuestros pueblos con edificios abandonados y lo aceptábamos siempre que hubiera respeto a la convivencia y no hubiera violencia ni delincuencia a su alrededor.

El INE considera una vivienda familiar desocupada cuando no es la residencia habitual de ninguna persona ni es utilizada de forma estacional, periódica o esporádica por nadie. En España, según ese censo, hay 3.443.365 viviendas vacías.

No hay datos fiables de viviendas okupadas, pero el Instituto Cerdá estima que hay unas 100.000 y unas 80.000 de ellas son propiedad de bancos, por lo tanto, ¿cuál es el principal problema de este país? ¿Que se okupen viviendas de particulares, lo cual es reprochable, o que 80.000 familias, muchas con hijos menores y de todas las condiciones sociales, tengan que cometer un delito como es la okupación de pisos de bancos para sobrevivir cuando han sido abandonados por las Instituciones que han estado manteniendo con sus impuestos y debían protegerles?

Hay que solucionar tanto un problema como otro, pero los movimientos actuales acerca de la okupación, ¿hacia dónde se dirigen? ¿De dónde ha surgido esta campaña cuando ni las asociaciones de magistrados consideran que haya que modificar la ley de 2018, sino dotar de más recursos a los Juzgados para que no sean tan lentos?

Nuestra forma de denunciar públicamente los desahucios e impedirlos así como nuestra denuncia mediante ocupaciones públicas de edificios de los Bancos a través de nuestra obra social, siempre han molestado a los bancos y fondos buitre que se han puesto manos a la obra para tratar de pararlos a través de sus partidos afines y fruto de esto fue el primer ataque contra nuestra labor con la aprobación de la Ley Mordaza, que castigaba con cuantiosas multas nuestra forma de evitar los desalojos, y que numerosos compañeros y compañeras han sufrido.

Lo siguiente a por lo que había que ir para dejar libre el camino de los Bancos y Fondos Buitre era tratar de criminalizar todas las okupaciones y eliminar nuestra Obra Social bajo el pretexto de expulsar cuanto antes a esas personas sin escrúpulos que se metían en tu vivienda cuando te ibas de vacaciones, proteger a la anciana que sale a hacer la compra y al volver se encuentra con gente en su casa o actuar contra la proliferación de los narcopisos.

El primer intento tuvo lugar con una ley de desahucios express en 2018, que agilizaba a días o semanas los desalojos y que, debido a nuestra presión, dejó fuera de su aplicación a las viviendas de los bancos y fondos Buitre, lo cual enfureció a los mismos, que no pararían en su intento de cargarse nuestra Obra Social.

Pero ahora iban a diseñar su estrategia con más calma y para ello tenían que poner nuevamente en marcha a sus Partidos serviles en el Congreso para que presentasen Proposiciones de Ley contra la okupación, que fueron presentadas por Ciudadanos y PP en el mes de julio y acompañar esto con una fuerte campaña mediática con casos sangrantes para sembrar el miedo en la población a que en cualquier momento salgas de casa y a la vuelta te encuentres a alguien en la misma. Los efectos ya los estamos observando con manifestaciones e incluso, violencia arrojando huevos y piedras contra los Okupas de diferentes condiciones, para expulsarlos de las casas. La estrategia del miedo y la campaña mediática van allanando el camino a las leyes.

Pero esta vez el ataque es más fuerte y peligroso ya que estos partidos, concretamente Ciudadanos y PP, a los que seguro que próximamente se unirá Vox, y que pugnan por ver quién está más a la Derecha, no solo criminalizan a todos los okupas sin distinguir su situación o si tienen hijos menores, lo cual viola las leyes Españolas y Europeas de Derechos Humanos e incluso la Doctrina del propio Tribunal Supremo, sino que además les imponen penas de cárcel y, ¡oh, sorpresa!, no distinguen entre viviendas de particulares o de bancos, lo cual, no solo supone una clara estrategia de criminalización de la pobreza y violación de Derechos Humanos, sino que deja en evidencia claramente quién dirige esta campaña.

Si a esta peligrosa estrategia del populismo de criminalizar la pobreza metiendo a todos en el mismo saco, le unimos los devastadores efectos que está trayendo la pandemia a la economía en forma de paro y con ello, masivos impagos de hipotecas y alquileres, si usted querido lector es uno de estos afectados y hoy día puede serlo cualquiera, vaya cogiendo sitio para dormir en algún cajero, debajo de un puente o, si está muy desesperado, okupe una vivienda que en la cárcel por lo menos, tiene un techo y le dan de comer, si me disculpa la ironía.

Si estos políticos se centran más en solucionar nuestros verdaderos problemas, que para eso les pagamos demasiado bién, les apoyaremos, pero si pretenden criminalizar la pobreza para favorecer a los verdaderos delincuentes con corbata que hay en este país, siempre nos encontrarán enfrente.

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