Ion Salgado
Gasteiz

Martxoak 3 entrega ‘Las campanadas de la conciencia’ a Periko Solabarria

Solabarria ha mostrado su respeto por los obreros fallecidos en 1976 con siete claveles, y los familiares de estos le han devuelto el detalle con la entrega de ‘Las campanas de la conciencia’.

Periko Solabarria junto a Amparo Lasheras, Antonio Álvarez Solís, Andoni Txasko e Iñigo Arregi, autor del libro. (Juanan RUIZ/ARGAZKI PRESS)
Periko Solabarria junto a Amparo Lasheras, Antonio Álvarez Solís, Andoni Txasko e Iñigo Arregi, autor del libro. (Juanan RUIZ/ARGAZKI PRESS)

La Asociación de Víctimas del 3 de Marzo (Martxoak 3) y Periko Solabarria se han rendido un homenaje mutuo en Gasteiz. Él ha mostrado su respeto por los obreros fallecidos en 1976 con siete claveles, y los familiares de estos le han devuelto el detalle con la entrega de ‘Las campanas de la conciencia’. Una escultura para premiar una «vida de trinchera», que, según su autor, Iñigo Arregi, representa el tañido de unas campanas que quieren evitar el olvido.

Por su parte, Solabarria ha repartido siete claveles, cinco para allegados de los obreros muertos –Pedro María Martínez de Ocio, Romualdo Barroso, Francisco Aznar, José Castillo y Bienvenido Pereda–, una para los heridos durante la huelga de 1976, y otra para Amparo Lasheras, que ha presentado una reedición corregida y aumentada del libro ‘3 de Marzo de 1976’.

En la presentación, a la que han asistido decenas de personas, también ha estado presente el periodista Antonio Álvarez Solís, que ha elogiado el trabajo de Lasheras. A su parecer, el libro es una obra de «herida abierta» que mantiene vivo el recuerdo y la memoria de unas personas que murieron a manos de la Policía Armada española por defender sus derechos.

A este respecto, Álvarez Solís ha destacado que las personas que se encerraron hace ya 37 años en la iglesia de San Francisco luchaban por «6.000 pesetas en nombre de la libertad». Tal como ha recordado, no se trató solo de un aumento laboral, porque los muertos representaban a todo un pueblo que clamaba, y aún clama, por sus derechos.

Periko Solabarria ha comparado la situación que vivieron las personas que se dieron cita en el barrio de Zaramaga en 1976 con la que hoy en día afrontan miles de personas en Euskal Herria. En este sentido, ha subrayado, citando a CCOO y a UGT, que el sindicalismo revolucionario imperante hace tres décadas ha desaparecido. «Ahora son una mera correa de transmisión del poder», ha lamentado.

Compromiso

Amparo Lasheras ha señalado que la obra es una reedición de un libro publicado hace doce años. Un reportaje «con color», en el que cuenta como vivió la huelga del 3 de Marzo y el ataque de la policía a la iglesia de San Francisco. «Entendí que hay momentos en los que la gente se tiene que comprometer», ha afirmado.

En opinión de Solabarria, que ha reconocido la labor de la periodista, ese compromiso es necesario en la actualidad. Ante aumento de los desahucios, el paro, la pobreza y los recorses «es necesaria la desovediencia y la resistencia», ha defendido.