En esta ocasión, según ha explicado Ramón Contreras, portavoz de San Fermin 78 Gogoan, en el acto intervendrán personas que resultaron heridas por la Policía en 1978 y familiares de los dos fallecidos –Joseba Barandiaran falleció en Donostia en una protesta por la muerte de Germán Rodríguez–. El comunicado lo leerá Gloria Bosque, que fue detenida junto a Germán con anterioridad a su muerte.

Asimismo, se hará referencia a la querella contra los crímenes del franquismo que se ha presentado en Argentina, «para visualizar que es una vía que supone un resquicio para acabar con la impunidad».

Contreras ha recordado que Rodolfo Martín Villa, ministro de la Gobernación en 1978, ejemplifica qué supuso la denominada Transición. Pasó de Falange a ser ministro de UCD para acabar dirigiendo empresas privatizadas como Endesa. «Hubo una continuidad del franquismo», ha añadido.

«Sin los sanfermines del 78 no se explica la situación que se vive hoy. Exigir verdad, justicia y reparación no es nostalgia, sino presente y futuro», ha añadido Contreras.

Josu Ibargutxi, de la plataforma vasca en apoyo a la querella argentina, ha destacado que la muerte de Germán Rodríguez es una muestra de que la llamada Ley de Amnistía de 1977 –una norma de punto final– no acabó con el franquismo, que estuvo vivo en los hechos de 1978 y en otros posteriores, como la muerte de Yolanda González en 1980. Ha recordado que entre 1975 y 1982 hubo más de 200 asesinatos de carácter político en el Estado español.