«Estoy contenta de que el Partido Popular de Navarra haya considerado útil mi colaboración, en un momento especialmente complicado para la defensa de la foralidad y la Constitución [española]. El proyecto no es nuevo, ya que lo he compartido en mi pasado como senadora», declara Salanueva al rotativo de Cordovilla. 

A juicio de Salanueva, el PP de Ana Beltrán «está plantando cara al cuatripartito con valentía y de manera ejemplar. Y agradezco la oportunidad de trabajar en todo lo que pueda para contribuir al desalojo del cuatripartito de las principales instituciones antes de que sea demasiado tarde».

Beltrán, por su parte, en declaraciones al mismo medio, abre las puertas del PP «a todas las personas que piensen en lograr en 2019 el gran objetivo de evitar que el cuatripartito, que tanto daño está haciendo a Navarra con sus políticas nacionalistas vascas, continúe gobernando».

Rival de Esparza en 2015

Amelia Salanueva disputó el liderazgo de UPN a Javier Esparza en la asamblea que el partido celebró en 2015. La tercera participante en esa liza fue María Kutz, que acaba de anunciar que se enfrentará a Enrique Maya para la candidatura a la Alcaldía de Iruñea en 2019.

Tras su derrota fue desplazadade las listas al Parlamento español, donde fue senadora desde 2004 a 2007 y de 2011 a 2015.

En 2013, se enfrentó a Yolanda Barcina, alineándose con Alberto Catalán en la lucha por el liderazgo del partido. Además, Salanueva ha sido concejal en Lizarra, parlamentaria y consejera del Gobierno navarro.

La fuga de Salanueva de UPN refleja que las heridas abiertas por el control del partido no han cicatrizado del todo y que la derecha navarra ha comenzado ya a moverse de cara a las elecciones forales de 2019.