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Marlaska no cree «conveniente» mantener el alejamiento de presos vascos

El ministro español del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido que el alejamiento de los presos políticos vascos «era una política antiterrorista, no una política penitenciaria», por lo que no cree «conveniente» mantenerla una vez disuelta ETA. Sare ve «positivas» las declaraciones del ministro, pero pide prudencia. «Esas palabras tienen que volverse realidad».

Fernando Grande-Marlaska, prometiendo como ministro de Interior. (J.J. GUILLÉN/AFP)
Fernando Grande-Marlaska, prometiendo como ministro de Interior. (J.J. GUILLÉN/AFP)

Fernando Grande-Marlaska, ministro español del Interior, ha hecho estas declaraciones en su intervención en un foro en Las Palmas de Gran Canaria. Allí, el exmagistrado de la Audiencia Nacional ha sido interpelado por el público sobre el posible acercamiento de los presos a prisiones de Euskal Herria.

Grande-Marlaska ha explicado que no cree en «medidas indiscriminadas», sino en «la aplicación de las leyes y, en este caso, siempre en contacto con las asociaciones de víctimas», a las que ha agradecido el «respaldo» que están dando a su departamento.

A este respecto, ha pedido que se analice el balance de sus siete meses en el cargo, en el que «solo han sido trasladados a cárceles del País Vasco dos presos de la denominada vía Nanclares». Sin embargo, también ha afirmado que, «con ETA disuelta y derrotada por la sociedad», no le ve sentido «mantener una política antiterrorista cuya finalidad era debilitar a la organización, impidiéndole que controlase a sus militantes encarcelados».

En las actuales circunstancias, ha argumentado, debe atenderse a «criterios penitenciarios», a lo que las correspondientes juntas de tratamiento consideren más conveniente para cada recluso, algo en lo que no ha ocultado que se tiene en cuenta la cercanía a su entorno familiar.

Sare: «Esas palabras tienen que volverse realidad»

Tras estas declaraciones, Sare ha confirmado a NAIZ que, después de la manifestación celebrada el pasado sábado en Bilbo, solicitaron una reunión, mediante un correo ordinario, al Ministro del Interior. Todavía no han recibido respuesta al respecto.

Sare ve «positivas» las declaraciones del ministro, «ya que es importante que se empiece a hablar del tema». Pese a ello, pide prudencia. «Los hechos están por verse. Los presos tienen que estar en cárceles vascas y no a 200 kilómetros de distancia, como han sido los últimos acercamientos. Esas palabras tienen que volverse realidad», han apuntado.