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Donostia

Piden nueve meses para el fotógrafo Kote Cabezudo por intentar borrar pruebas

La Fiscalía de Gipuzkoa pide nueve meses de cárcel para el fotógrafo Kote Cabezudo, al que acusa de intentar borrar imágenes de un servidor informático antes de que la Ertzaintza pudiera acceder a él con el fin de obtener pruebas para la investigación que un juzgado donostiarra sigue en su contra.

Kote Cabezudo, en el exterior del juzgado. (Juan Carlos RUIZ/FOKU)
Kote Cabezudo, en el exterior del juzgado. (Juan Carlos RUIZ/FOKU)

Cabezudo se encuentra en prisión provisional en la cárcel de Martutene desde hace más de un año, mientras tiene lugar la instrucción de este caso, en el que está siendo investigado por presuntos abusos a modelos, estafa, agresión sexual y elaboración de pornografía infantil, entre otros delitos.

De esta causa principal han sido desgajados otros múltiples asuntos, uno de los cuales se refiere a este supuesto intento de hacer desaparecer pruebas del citado servidor informático.

Los hechos se remontan al 30 de julio de 2014 cuando, según el escrito de acusación provisional de la Fiscalía, la Ertzaintza registró el domicilio del fotógrafo con la intención de «incautar los soportes informáticos» de posibles imágenes y vídeos pornográficos relacionados con el caso.

No obstante, a pesar del registro realizado por la Policía autonómica en su vivienda, el procesado presuntamente «mantenía» más «material fotográfico y videográfico» de sus supuestas víctimas en dos páginas web alojadas en un servidor de internet que gestionaba su informático.

Con el fin de acceder a este material y «obtener posibles indicios de criminalidad», el 29 de enero de 2017 la Ertzaintza solicitó mediante telefax la correspondiente autorización judicial «para realizar un análisis forense remoto» del servidor.

De esta manera, «conocedor de los tiempos de reacción más lentos de un juzgado», el fotógrafo presuntamente aprovechó el traslado de esta diligencia que se le dio a través de su procurador para, supuestamente, escanear el telefax de la Ertzaintza.

Usuarios y claves de acceso

A continuación, adjuntó este documento a un correo electrónico que envió el 1 de febrero para reclamar que, al igual que demandaba la Policía, se le facilitaran los «usuarios y claves de acceso total a la información que pudiera haber guardada en el servidor» con la presunta intención de «borrarla», entorpeciendo así la labor judicial.

La Fiscalía considera que estos hechos son constitutivos de un delito de estafa procesal en grado de tentativa, por el que reclama para el encausado una pena de nueve meses de prisión.

Además de este caso, Cabezudo ya ha sido juzgado por otra causa desgajada del asunto principal, en la que ha sido condenado a dos años y tres meses de cárcel por un delito de obstrucción a la Justicia en concurso con otro de coacciones por intentar intimidar a una testigo colgando una fotografía suya desnuda en una red social.

Esta asunto ha sido apelado por Cabezudo ante la Audiencia de Gipuzkoa y se encuentra pendiente de resolución, mientras continúa la instrucción de la causa principal.