La decimoquinta etapa del Giro ha tenido dos batallas diferentes. Una la han protagonizado los italianos Dario Cataldo (Astana) y Mattia Cattaneo (Androni), que se han escapado en los primeros kilómetros, llegaron a tener 16 minutos de ventaja y han conseguido resistir la batalla registrada en los últimos kilómetros entre los favoritos. Cattaneo ha dejado a Cataldo la mayor parte del trabajo en la parte final, pero eso no ha impedido la victoria del corredor del Astana con apenas once segundos a los mejores entre los favoritos: Simon Yates, Hugh Carthy, Richard Carapaz y Vincenzo Nibali.

El siciliano ha atacado en el último puerto de Tercera de Civiglio y solo el líder Richard Carapaz ha podido seguirle para coronar junto a Simon Yates y Hugh Carthy, que marchaban por delante. En el descenso el corredor del Bahrain se ha marchado en solitario, pero Richard Carapaz lo ha atrapado cuando se entraba en los dos últimos kilómetros y ha trabajado para ampliar su ventaja sobre Roglic, que ha vivido otro día complicado.

El esloveno ha tenido que cambiar primero la bicicleta y coger la de su compañero Tolhoek y recuperar una desventaja que había llegado a ser de treinta segundos para entrar en el pelotón. En la última subida no ha podido seguir el ataque de Nibali y se ha caído en el descenso a cinco kilómetros de meta, a donde ha llegado a 40 segundos del siciliano y de Carapaz.

Landa ha llegado a 25 en un grupo intermedio con Majka y Miguel Ángel López y sigue quinto en la general, pero ahora ya a 3:15 de Carapaz. Roglic queda segundo a 47 si no es sancionado por coger un bidón y ayudarse por el coche de su equipo cuando marchaba descolgado, Nibali está a 1:47 y Majka es cuarto a 2:35.