Suecia estará en cuartos, a costa de una Canadá que ha tocado mejor en el primer tiempo, pero a la que se le han apagado las luces cuando ha llegado a los metros decisivos. No así a las escandinavas, que han encontrado en Asllani a la jugadora con la suficiente calidad como para marcar diferencias en el último pase.

De una magnífica asistencia de la jugadora de origen albano-kosovar del Linköping ha llegado la jugada crucial del choque, materializando el servicio Blackstenius ante la salida a la desesperada de Labbe. La pegada de las pupilas de Peter Gerhardsson ha resultado crucial para un combinado que va camino de firmar otra buena participación mundialista, pese a no realizar un fútbol excesivamente brillante.

Suecia y Canadá han protagonizado un envite de mucho control y escaso preciosismo, entre dos cuadros que dan prioridad al aspecto defensivo y a la estricta disposición sobre el campo. Se han encontrado cómodos ambos equipos con esa táctica durante los primeros cuarenta y cinco minutos. Mucho desgaste físico y todavía más imprecisiones, con continuos fallos en las combinaciones.

Con semejantes mimbres, apenas se han dado acercamientos peligrosos y, cuando la pelota se ha aproximado a ambas áreas, las ideas mutuas se han fundido en negro, hasta que la llegada del descanso le ha sentado mejor a las suecas.

Las amarillas han salido más entonadas y dispuestas a sacar tajada del menor error del rival. Este ha llegado pasados diez minutos de la reanudación, cuando la bisoña Beckie, desafortunada protagonista por partida doble, ha perdido un balón en medio campo, lo que le ha servido a la talentosa Asllani para desequilibar la contienda.

Ha tenido la ocasión Canadá de volver a subir las tablas al luminoso, pero el lanzamiento de la citada Beckie –ajustado pero sin la necesaria velocidad– ha sido interceptado por una felina estirada de Lindahl, a la que hay que atribuirle la mitad del mérito del pase. Aunque las de Kenneth Heiner-Moller han intentado poner cerco a la meta contraria, lo cierto es que ha sido Suecia quien ha estado más cerca de doblar su ventaja.