Maite Ubiria

Concentración de protesta en Baiona para alertar del riesgo de entrega de David Pla

El Tribunal de Apelación de París aceptó, el 20 de noviembre, la euroorden cursada por la Audiencia Nacional española contra el exinterlocutor de ETA David Pla. A unos días de que, el 18 de diciembre, el Tribunal de Casación adopte una decisión definitiva, esta tarde ha tenido lugar un acto de solidaridad a la entrada del liceo Bernat Etxepare de Baiona, donde cursa sus estudios Aitzol, uno de los dos hijos del ex preso navarro residente en Hendaia.

Movilización contra la entrega de Pla ante el liceo Etxepare, en Baiona. (Guillaume FAUVEAU)
Movilización contra la entrega de Pla ante el liceo Etxepare, en Baiona. (Guillaume FAUVEAU)

Una concentración a las puertas del liceo Bernat Etxepare de Baiona en el que cursa sus estudios Aitzol, el hijo de David Pla, ha servido para trasladar la solidaridad a la familia en vísperas de que el Tribunal de Casación se pronuncie, el día 18, sobre el recurso presentado por la defensa contra la sentencia adoptada, el pasado 20 de noviembre, por el Tribunal de Apelación de París.

El Tribunal de Apelación optó por aceptar el mandato de entrega que lleva la firma del ex ministro español de Justicia y hoy ministro de Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska.

Aun asumiendo en parte las alegaciones de la defensa, que en el curso del proceso judicial presentó pruebas que refutan los hechos que se relatan en la euroorden, el tribunal dio prioridad al principio de «confianza mutua» entre estados y determinó que los tribunales españoles «disponen de todos los elementos» para pronunciarse sobre la causa.

Hechos sin recorrido judicial en el Estado francés

El mandato europeo con fecha de 12 de mayo de 2011 al que dio luz verde el Tribunal de Apelación se refiere a hechos por los que el exmilitante de ETA fue detenido en abril de 2010 en Hendaia y que no dieron lugar siquiera a la apertura de causa judicial en el Estado francés.

Concretamente, en esa euroorden se le atribuye a Pla haber participado en una reunión clandestina en Landas que, según hace constar Grande-Marlaska, tuvo lugar el 17 de mayo de 2008.

Sin embargo, no solo el testimonio de Pla, sino también los informes policiales galos sitúan en esa fecha en París a quien fuera miembro de la delegación negociadora de ETA en Noruega.

Durante el juicio de euroorden celebrado el pasado 25 de setiembre en la sala de instrucción del Tribunal de Apelación, la defensa del ex preso navarro afincado en Hendaia, ejercida por la abogada Xantiana Cachenaut, aportó al tribunal los dos informes emitidos por la Policía gala en los que se desmiente la información remitida por la Audiencia Nacional española.

Al tiempo, la defensa hizo valer diversa jurisprudencia, según la cual la Justicia gala «se niega entregar a ciudadanos a los que se les imputan delitos cometidos en territorio francés».

En al menos cinco juzgados diferentes, siempre en causas relativas a ciudadanos vascos, se han dado en los últimos años decisiones que aplican ese criterio jurídico.

No obstante, al hacer público su fallo, el tribunal se escudó en el carácter opcional de ese criterio jurídico para descartar el argumento de la defensa de Pla.

Análisis de forma previo a la entrega

Así las cosas, el 18 de este mes la Corte de Casación tendrá la última palabra. Si esa instancia concluye que no existió defecto de procedimiento, ratificará la decisión del Tribunal de Apelación, lo que dejará a Pla a expensas de la ejecución de la entrega que, en todo caso, no tendría por qué ser ejecutada necesariamente de manera inmediata.

David Pla recobró la libertad en abril, tras cumplir la pena de prisión de cinco años que le fuera impuesta tras su detención, junto a la también responsable de ETA Iratxe Sorzabal, en setiembre de 2015 en Baigorri.

Prohibición de estancia en territorio francés

Después de que esa sentencia se hiciera firme, en febrero, el preso iruindarra recibió, no ya la comunicación de la euroorden, sino también la notificación de una prohibición de estancia en territorio francés durante el periodo de un año emitida por la prefectura de Val d'Oise.

La misma prefectura emitió igualmente «in extremis» una segunda orden de expulsión, esta vez definitiva, pero ese segundo procedimiento quedó descartado.

Un fallo favorable a Pla a cargo de la Corte de Casación dejaría pendiente de resolución ese procedimiento administrativo de prohibición de estancia en territorio del Estado francés.