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ARRASATE

Trabajadores de Araluce exigen a Mondragon una «posición activa» para evitar despidos

Los empleados de Araluce se han concentrado ante la sede de Mondragon Corporación para exigir que adopte una «posición activa» de cara a poder llegar a un acuerdo que no sea el despido de la plantilla de esta empresa, pertenenciente al grupo Batz integrado en la corporación cooperativa. La dirección ha rechazado una posible recolocación.

Los trabajadores de Araluce, ante la sede de Mondragon Corporación en Arrasate. (@ELAsindikatua)
Los trabajadores de Araluce, ante la sede de Mondragon Corporación en Arrasate. (@ELAsindikatua)

Los trabajadores de Araluce han iniciado su protesta en la plaza del Ayuntamiento de Arrasate y, tras realizar un recorrido por las calles de la localidad, se han dirigido a la sede central de la Corporación Mondragon.

El presidente del comité, Iñaki Salazar, ha indicado que con esta concentración han querido reclamar a Mondragon que «tome parte activa en este conflicto» y deje su «posición de inmovilismo para poder llegar a un acuerdo que no sea el despido de los trabajadores».

El presidente del comité ha añadido que, a través de ELA y LAB, se ha intentado en alguna ocasión poder mantener una reunión con responsables de Mondragon sin que finalmente se haya producido.

Por otra parte, ha indicado que este jueves el administrador concursal se ha puesto en contacto con el comité y les ha convocado a una reunión este viernes a las 11.30 en el CRL en Bilbo.

Iñaki Salazar ha indicado que en la reunión del 9 de diciembre el propio administrador dio por cerrado el periodo de consultas del ERE de extinción planteado para los 141 trabajadores de Araluce y, según ha apuntado, ahora les ha trasladado que entiende que se podría abrir nuevamente ese periodo, por lo esta cuestión se abordará este viernes en el CRL.

Batz rechaza la recolocación

El Grupo Batz ha rechazado una posible recolocación de los trabajadores de la concursada Araluce en el grupo y ha alegado, para ello, que la reivindicación carece de «potestad legal», así como las «pérdidas recurrentes» tanto en la empresa en concurso como en la cooperativa Batz. Por otra parte, tras denunciar la «actitud de conflicto» del comité de empresa, ha afirmado que el proceso de liquidación de Araluce es «inevitable» y que su situación es «insostenible».

La dirección ha argumentado que Araluce es una «sociedad soberana y responsable de sus cuentas» y ha indicado que «carece de potestad legal cualquier pretensión de solicitar la incorporación de los trabajadores afectados en una sociedad tercera como es Batz S. Coop, al no formar un grupo patológico laboral con la misma».

Batz ha explicado que, «desafortunadamente», este proceso «inevitable» se produce por la incertidumbre económica que se vive por la falta de lanzamientos de vehículos en todo el mundo y «que no se espera que revierta en el corto/medio plazo», así como por la situación de insolvencia de Araluce, derivada de las «pérdidas recurrentes» que la empresa vive desde 2015 y que, según ha apuntado, se ha agravado durante los dos últimos ejercicios.

El grupo ha indicado que, sumado al ya «complicado contexto del mercado», está la «actitud de conflicto y negativa constante» del comité de empresa durante los meses previos a la declaración del concurso. Batz ha señalado que los representantes de los trabajadores han rechazado «en todo momento» cualquiera de las propuestas puestas sobre la mesa que hubieran permitido a Araluce «disponer de más tiempo», como carga de trabajo y financiación para la búsqueda de un inversor, lo que ha llevado a Araluce a la situación «irreversible en la que se encuentra actualmente».

«Es más, han procedido incluso a retener troqueles y otros productos terminados, que debían haberse entregado meses atrás a clientes finales, provocando un grave perjuicio y enorme riesgo para estos clientes y para cualquier futuro viable para la propia Araluce S.A.U., comprometiendo la confianza en la misma», ha agregado la dirección de la cooperativa a través de una nota.