Joseba ITURRIA

Beñat Intxausti: «Me voy con la tranquilidad de haberlo dado todo y no rendirme nunca en el final»

Beñat Intxausti ha anunciado en una rueda de prensa que ha ofrecido esta tarde en Bilbo su retirada tras trece años como ciclista profesional en los que ha logrado grandes momentos, entre las que destaca las dos etapas del Giro y vestir la maglia rosa, que ha antepuesto a los últimos años de calvario tras ser atacado por un virus en 2016 que le ha impedido recuperar su nivel.

Beñat Intxausti ha comparecido hoy en Bilbo ante los medios (Luis JAUREGIALTZO / FOKU)
Beñat Intxausti ha comparecido hoy en Bilbo ante los medios (Luis JAUREGIALTZO / FOKU)

Beñat Intxausti (Zornotza, 1986) destaca al confirmar su retirada como ciclista profesional que «me voy con la tranquilidad de haberlo dado todo y no rendirme nunca en el final. Me quedo con buenos recuerdos de mi época buena, agradecido a toda la afición, a la gente que me ha animado siempre. He tenido mucha suerte con la afición vasca y con todos los equipos, en los que he estado muy a gusto y que siempre han sido muy buenos. Eso me hace sentir muy agradecido. La pena es no haber podido disfrutar de los años en el Sky».

Pone fin así a 13 años como profesional en Nicolás Mateos (2007), Scott (2008), Fuji (2009), Euskaltel (2010), Movistar (2011-15), Sky (2016-18) y Euskadi Murias (2019), en los que logró dos etapas en el Giro (2013-15), la general de Asturias (2012) y Beijing (2013). Fue segundo en 2010 y cuarto en 2011 en la Itzulia, tercero en Polonia (2014), cuarto en Dauphiné (2015), quinto en Romandia (2011) y octavo en el Giro (2013). Por encima del calvario padecido desde que un virus le atacó en 2016 en su mejor momento, destaca a NAIZ que «he logrado victorias en carreras muy importantes. Ha habido muchas cosas buenas a parte de lo malo de los últimos años».

Con Movistar alcanzó su mejor nivel en el Giro, con dos etapas y un octavo puesto en la general en tres participaciones: «Las dos etapas y subir al podio con el maillot rosa fue lo más, un momento cumbre. Soy de los pocos vascos y el único vizcaíno que ha vestido ese maillot. He tenido con el Giro un enamoramiento. Ha sido mi carrera preferida, la tenía controlada... Siempre he dicho que me he sentido muy a gusto. Me ha encantado Italia, el recorrido, la afición, las fechas, el ambiente...».

Se muestra agradecido especialmente a Xabier Artetxe: «Es la persona que más me ha ayudado deportivamente. Me ha hecho mejor. Si no fuera por él no habría sido ciclista profesional. Empezó todo con él en un proyecto nuevo de Seguros Bilbao con corredores juveniles y desde entonces hemos tenido una relación personal y profesional paralela de mucha confianza hasta el final».

El inicio de su calvario comenzó cuando se volvía a encontrar con Xabier Artetxe en el Sky en 2016: «En mi primera carrera fui tercero en la Vuelta a Valencia ganada por un compañero, pero ahí empezó el dichoso problema de la enfermedad, un calvario de altibajos sin encontrar el tono de pedal y de rendimiento. Lo he intentado una y otra vez, pero el último año no alcancé el nivel de antes a pesar de estar bien de salud. Fui de menos a más hasta mayo, pero a partir de ahí no mejoraba y desde el verano empecé a mentalizarme con la idea de lo que podía pasar. No me encontraba con ánimo de correr, veía que no progresaba y las carreras no me fueron bien. Era mi última oportunidad de demostrarme que podía llegar a mi nivel. He hecho todo lo posible, pero no rendía como quería y eso me ha hecho tomar esta decisión».