Dabid Lazkanoiturburu

China multiplica sus esfuerzos ante la propagación del coronavirus

Criticada  por su gestión opaca de la epidemia de SARS a principios de los años 2000, China ha decidido curarse en salud y está anunciando medidas, a cual más quirúrgica, para afrontar la epidemia de coronavirus. El propio líder chino, Xi Jinping, ha convocado al comité permanente del PCCh ante la «gravedad de la crisis».

Pruebas médicas a un posible infectado en un hospital de Wuhan. (HECTOR RETAMAL-AFP)
Pruebas médicas a un posible infectado en un hospital de Wuhan. (HECTOR RETAMAL-AFP)

El Gobierno chino, que no ha olvidado las críticas a su gestión de la epidemia del SARS (Síndrome Agudo Respiratorio Severo) en  2003 (650 muertos) por parte no solo de sus rivales occidentales sino de la propia Organización Mundial de la Salud (OMS), ha decidido coger el toro por los cuernos.

Pero lo ha hecho con tal determinación que corre el riesgo de incrementar aún más la alerta por una nueva epidemia de coronavirus, esta vez la de la neumonía viral, que de momento ha dejado un saldo de 41 muertos (sobre todo menores de edad, ancianos y personas con enfermedades crónicas) y 1.300 personas infectadas en el país.

Despliegue del Ejército y sus equipos médicos, restricciones de circulación draconianas en la ciudad de Wuhan, donde el Gobierno  ha anunciado la construcción en dos semanas de un segundo hospital, controles sistemáticos en los transportes de todo tipo del norte al sur del gigante asiático, orden de que todas las agencias chinas anulen desde el lunes todos los paquetes y reservas de viajes tanto en el interior de China como al extranjero...


Año Nuevo de la Rata

China ha entrado hoy en el año de la Rata marcada por els igno del coronavirus que se detectó en Wuhan en diciembre.

Nada de petardos, ni de danzas del dragón. En el Año Nuevo chino, las calles de la metrópoli del centro del país parecían muertas, con los escasos paseantes tapándose la cara con una máscara de protección.

En Pekín, donde los reclamos turísticos están cerrados, las festividades del Nuevo Año se han suspendido. La capital parecia desierta y sus restaurantes estaban prácticamente vacíos.

«Reforzar el Partido»

El omnipresente presidente chino, Xi Jinping, ha convocado al Comité Permanente del Partido Comunista Chino (PCCh), compuesto por los siete altos cargos que le secundan en la dirección del país, e insistió en que China «puede ganar esta batalla».

Xi ha insistido en que «ante la situación grave de una epidemia que se acelera (...) es necesario reforzar la dirección centralizada y unificada del Comité Central del Partido»

Tras registrar cinco casos de contaminación, Hong Kong, escenario de una revuelta contra el poder central de Pekín, ha anunciado el reforzamiento de los controles para controlar la llegada de chinos continentales. Lo mismo ocurre en Macao.

Propagación mundial

Este tipo de epidemias son el mejor caldo de cultivo para el alarmismo, que por otro lado está cada vez más en el ADN de la gran mayoría de los medios de comunicación (hay que tener a la gente enganchada a los partes diarios).
Pero un análisis de la propagación de la epidemia, más allá de la habitual tendencia, igualmente mediática, que nos obliga a mirarnos al ombligo, no abona, de momento, semejante alarma.  

Tailandia registra cinco casos, frente a cuatro en Australia, y todos ellos afectan a gente que llegó de Wuhan. Lo mismo ocurre con los tres casos en el Estado francés. uno de ellos en Burdeos (¡Atención, a escasos kilómetros de Euskal Herria!). Todos ellos viajaron recientemente a la ciudad china.

Igualmente, Japón registra tres casos, al igual que Malasia , Singapur y Taiwán. Finalmente, tanto EEUU como Corea del Sur y Vietnam registran dos casos, frente a un único contagiado en Nepal.

De momento, ninguno de los casos registrados fuera de China ha acabado en deceso, al contrario de lo que ocurrió con el SARS, donde se registraron cerca de 300 muertes aparte de las 650 en China y Hong Kong.

Entre nosotros, la analítica de la paciente ingresada en régimen de aislamiento en el hospital de Cruces, en Barakaldo (Bizkaia), y procedente de Wuhan, ha dado negativo.