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Transporte gratuito en Ipar Euskal Herria para los trabajadores movilizados ante la crisis sanitaria

La Mancomunidad Vasca ha decidido que a partir de hoy los trabajadores movilizados por la crisis sanitaria, ya sea personal de hospitales, de residencias de ancianos o de personas con incapacidades graves, ya empleados del sector de la limpieza o del comercio, puedan utilizar los transportes colectivos incluidos en la red Txik Txak sin pagar billete.

Un microbús circula ante el Hospital de Baiona. (Bob EDME)
Un microbús circula ante el Hospital de Baiona. (Bob EDME)

La Mancomunidad Vasca y el sindicato de movilidad han decidido que la red de transporte colectivo Txik Txak ofrezca servicio gratuito, a partir de este 26 de marzo, a las personas que deben acudir a trabajar en plena crisis sanitaria.

La medida se dirige especialmente a los empleados de hospitales o residencias, pero se extenderá a sectores muy solicitados en este periodo de pandemia, caso de los trabajadores de limpieza o de las empleadas de las grandes superficies comerciales.

«Vamos a garantizar que el transporte público siga funcionando en todo el territorio cara a dar un servicio necesario para las personas que desarrollan actividades esenciales en este país», ha informado la institución de Ipar Euskal Herria.

Por ello, desde este jueves bastará con que los trabajadores presenten un justificativo de desplazamiento profesional –obligatorio desde que entrara en vigor el confinamiento, el 17 de marzo– para poder acceder a la red de transporte colectivo, sin deber abonar billete.

La Mancomunidad insiste en que «la protección de trabajadores y usuarios» de la red, que incluye autobuses y servicio de tram’bus, será una prioridad.

Ello, después de que se conociera que un chófer de la red de autobuses Chronoplus, que asegura el servicio en el BAB (Biarritz-Angelu-Baiona) fue ingresado en estado grave, el pasado sábado, tras ser contagiado de Covid-19.

Las medidas de seguridad se han aumentado con medidas de higiene reforzadas, y también con la puesta en marcha de sistemas de barrera para aislar a los chóferes, que además ya no se encargan de expedir los billetes a los pasajeros.

Los usuarios, por su parte, tienen prohibido acceder por la puerta delantera a los autobuses y deben respetar las medidas de distanciamiento que tienen por objeto dificultar la transmisión del coronavirus.