A falta de ver cómo sale la Liga ACB del nuevo entuerto en el que se ha metido, no parece que la campaña 2020/21 de la mentada competición arranque con 20 equipos en liza, con un posible lío en los tribunales en el horizonte. La Liga LEB Oro presentaba hace una semana un protocolo al respecto según el cual ha de haber dos ascensos a la Liga ACB se juegue o no una fase final de su categoría. Así las cosas, Delteco Gipuzkoa Basket y Valladolid parten con ventaja para ascender llegando a obtener el ascenso automático en caso de que no pueda disputarse una fase final.

Pero el camino a la élite del basket en el Estado español va a ser de lo más proceloso. Los clubes de la Liga ACB consensuaron hace un mes un final de temporada sin descensos, por lo que los 18 clubes que en la actualidad juegan la competición, incluyendo a Estudiantes y Fuenlabrada, los dos clubes inmersos en puestos de descenso, volverían a la campaña 2020/21.

Así las cosas, el empeño de la Liga LEB oro se está encontrando con la puerta de la ACB cerrada a cal y canto, por mucho que el presidente de la FEB, Jorge Garbajosa, consulta del Consejo Superior de Deportes mediante, se refiera al «convenio existente» según el cual el primer clasificado de la Liga Regular de la LEB Oro –por eso es que está programado un partido de «segunda vuelta» entre Valladolid y GBC, para dirimir quién va a ascender en calidad de primer clasificado– y el ganador en los playoffs de ascenso, deben ocupar el sitio de los dos descendidos de la categoría inmediatamente superior.

A lo largo de la semana, diversos medios han especulado sobre la opción de preparar una temporada 2020/21 de la ACB con 20 equipos sin playoffs, en vista de que la carga de partidos va a comprimir aún más los calendarios ya de por sí saturados con la propia competición doméstica, la Basketball Champions League, la Eurocup, la Euroliga, amén de las «ventanas» clasificatorias para el Eurobasket de 2022 y el preolímpico de Tokio 2021. Otra de las ideas expuestas ha sido dividir esa Liga ACB en dos grupos de 10 clubes, al estilo Grupo Par / Grupo Impar del año 1990, para poder dirimir luego a los campeones vía playoffs.

Nada de eso parece convencer a los equipos que a día de hoy funcionan en la Liga ACB, como bien se desprende de las declaraciones del director deportivo de Bilbao Basket, Rafa Pueyo, y del presidente de Saski Baskonia, Josean Kerejeta.

Espacio limitado

«Ninguno de los equipos que estamos ahora en la ACB queremos que se amplíe a 20 equipos», ha afirmado con rotundidad Rafa Pueyo en una entrevista a Radio Euskadi. El director deportivo del club bilbaino ha argumentado su oposición a esta ampliación diciendo que «no sería bueno ni para la competición ni económicamente. Supondría jugar cuatro jornadas más y repartir los derechos de televisión entre más equipos. Por lo tanto, ello supone menos ingresos. Por otro lado, que no hubiera playoffs haría perder atractivo la competición. Veremos la determinación que se toma, pero en principio creo que no sería algo bueno para la competición ni para los clubes».

En parecidos términos, Josean Kerejeta ha expresado su negativa a ampliar la Liga ACB a 20 clubes. En una entrevista concedida a Onda Cero, el presidente de Saski Baskonia, amén de afirmar de que en la última Asamblea de la ACB se obtuvo el compromiso del presidente de la Liga, Antonio Martín, de que no hubiera más de 18 equipos en la competición, ha vuelto a reafirmarse en su opinión de que «no hay fechas ni posibilidades económicas para disponer de 20 equipos». Solo ha añadido el matiz de que «si hay dos ascensos, debería haber de alguna forma dos descensos».

Tanta es la delicada situación esta que se vive, que el lazkaoarra se ha mostrado preocupado sobre el futuro inmediato del basket. «Me preocupa mucho más el baloncesto porque tienen mucha menos capacidad de generar recursos que el fúltbol», ha sentenciado Kerejeta.