Maite Ubiria

La ministra de Transición Ecológica francesa desaconseja «reservar vacaciones en España»

El anuncio por el presidente español, Pedro Sánchez, de que las fronteras se abrirán para el turismo extranjero en julio, no parece convencer a su estado vecino. La ministra de Transición Ecológica, Elisabeth Borne, ha afirmado que no recomienda a los franceses hacer reservas turísticas en el Estado español sino más bien «que hagan sus reservas en Francia».

Ciudadanos dando un paseo junto a la playa de La Madrague, en Angelu. (Guillaume FAUVEAU)
Ciudadanos dando un paseo junto a la playa de La Madrague, en Angelu. (Guillaume FAUVEAU)

Fronteras abiertas para los turistas extranjeros a partir de julio. El anuncio hecho el sábado por el presidente español, Pedro Sánchez, tendrá una respuesta oficial cuando el Gobierno francés presente en la semana que comienza su «plan de vacaciones».

No obstante la ministra de Transición Ecológica, Elisabeth Borne, ha sido taxativa al afirmar ante los micrófonos de FranceInfo que «hoy no recomiendo a los franceses que reserven sus vacaciones en España sino que hagan sus reservas, para julio y agosto, en Francia».

La ministra se ha referido a «la situación difícil en las fronteras», especialmente con países situados fuera del área de Schengen, para desaconsejar «hacer reservas en el extranjero» aunque ha hecho extensible su opinión al estado vecino, dado que Madrid y París tienen en vigor medidas de cuarentena de catorce día para visitantes de uno y otro estado.

Concretamente Borne ha afirmado que la anunciada apertura de fronteras en julio «es una decisión de España, que al tiempo ha anunciado otras medidas para los viajeros que llegan en avión, lo que es un poco contradictorio», por lo que se ha mostrado prudente al asegurar que «el Gobierno francés esperará a ver cómo evoluciona la situación».

En 2019 un total de 1.420.601 turistas procedentes del Estado francés optaron por un destino vacacional en el Estado español, siendo el colectivo más numeroso detrás de británicos y alemanes.

100 kilómetros a espera del salto hexagonal

Actualmente, los ciudadanos del Estado francés sólo pueden desplazarse en un máximo de 100 kilómetros, lo que equivale al departamento.

Prueba de ello, a lo largo de este puente de la Ascensión en el litoral labortano se han visto numerosas matrículas de vehículos procedentes de Pau. Muchos visitantes de Bearne no han dudado en aprovechar estos días festivos para pisar los arenales vascos.

A la espera de que esta semana París aporte más detalles sobre los siguientes pasos a dar dentro del desconfinamiento progresivo iniciado el 11 de mayo, el primer ministro Edouard Philippe ya animó semanas atrás a los franceses, como hoy ha hecho Elisabeth Borne, «a reservar sus vacaciones para julio y agosto dentro de Francia».

La muga sigue bloqueada

Las divergencias en la aplicación de protocolos durante la pandemia han sido una constante. Parece que más de lo mismo ocurrirá con la desescalada.

Así las cosas hoy por hoy es imposible saber cuándo los ciudadanos de un lado y otro del Bidasoa recuperarán la libertad de movimientos. El anuncio de Sánchez parecía apuntar a que eso ocurriría en julio, de la mano de la apertura de fronteras a los turistas.

Las declaraciones de Borne no dejan claras las intenciones de París. O al menos ponen en evidencia que los dos estados no han compartido criterios, de momento, en esta cuestión, por más que sus decisiones tengan implicaciones directas en el día a día de miles de ciudadanos cuya vida cotidiana discurre entre Gipuzkoa, Lapurdi y Nafarroa.

Y entre un estado y otro la Unión Europea tercia con la vista puesta en una recuperación del movimiento interno dentro de la UE para mediados de junio.

Kotte Ezenarro y Jose Antonio Santano, alcaldes de Hendaia e  Irun, ya han reclamado que se alivie ese cierre de frontera, con la apertura de la muga de Behobia. Ello permitiría al menos evitar las colas kilométricas en el puente de Santiago.

De manera previa, alcaldes de Lapurdi y Nafarroa ya se habían dirigido por carta a la Prefectura, sin que recibieran una respuesta satisfactoria a su petición de permitir, como ocurría hasta el 11 de abril, que los vecinos pudieran hacer sus desplazamientos por los pasos «menores» cercanos a sus localidades, sin tener que hacer centenares de kilómetros semanales para cruzar la muga por Dantxaria o Irun.

La presidenta navarra María Chivite y el lehendakari Iñigo Urkullu se han sumado este domingo en la reunión con Moncloa a la demanda de que se levanten las limitaciones a la «actividad transfronteriza», apelando al trabajo que comparten en el marco de la euroregión Euskadi-Navarra-Nueva Aquitania.