MARTXELO DIAZ

Las residencias navarras buscarán crear espacios «más hogareños»

Crear espacios «hogareños» es uno de los objetivos del decreto de autorizaciones que regulará las residencias navarras y que ha sido presentado hoy por la consejera de Derechos Sociales, María Carmen Maeztu.

Un hombre sale de las dependencias de la Meca, en Iruñea. (Iñigo URIZ/FOKU)
Un hombre sale de las dependencias de la Meca, en Iruñea. (Iñigo URIZ/FOKU)

El decreto que ha presentado hoy la consejera de Derechos Sociales, María Carmen Maeztu, busca convertir las residencias en un espacio a la medida de las personas, según ha destacado en una comparecencia en el Palacio de Nafarroa. Este proyecto de decreto entra ahora en el trámite de participación ciudadana y se espera que pueda estar definitivamente aprobado para noviembre o diciembre.

Entre las novedades que incluye el decreto destaca la creación de unidades de convivencia, que buscan crear «un modelo más hogareño, cercano a las personas. En los centros de nueva creación o en los que se amplien próximamente, el 65% de las plazas deberá estar destinada a estas unidades de convivencia, que albergarán a 16 personas como máximo.

El objetivo es «huir de centros despersonalizados» y para ello se crearán espacios que tengan dotaciones como habitaciones individuales de catorce metros cuadrados como mínimo y baño propio. Además, se impulsará que se puedan personalizar con objetos propios y se prevé que las unidades cuenten con cocina y sala de estar.

En las residencias que haya unidad de Sicogeriatría, esta estará diferenciada del resto.

Foco en las personas

El decreto también busca poner «el foco en las personas que se atienden», partiendo desde el concepto de que se cuenta con las personas que están en las residencias.

De este modo, se busca que los residentes participen en las tomas de decisión de los centros en cuestiones como los horarios de comidas o de descanso, siempre dentro de unos parámetros generales.

En el ámbito de personal, el decreto establece, en esta línea, que se «dedicará más tiempo a escuchar a la gente». Junto a ello, se aboga por mejorar la estabilidad en el empleo.