naiz
París

De los hospitales a las calles, por unos cuantos miles de millones más

Cuando apenas faltan unos días para que se dé por concluido el proceso de concertación denominado “Ségur de la santé”, el personal hospitalario se ha manifestado de nuevo este martes en decenas de ciudades del Estado francés para obtener muchos más de los 6.300 millones de euros que ya están sobre la mesa.

Un momento de la manifestación que se ha realizado este martes en Marsella. (Clement MAHOUDEAU | AFP)
Un momento de la manifestación que se ha realizado este martes en Marsella. (Clement MAHOUDEAU | AFP)

Tras el éxito de la movilización del 16 de junio (entre 100.000 y 180.000 manifestantes según distintas fuentes consultadas por AFP), los sindicatos y colectivos del sector hospitalario querían mantener la presión sobre el Ejecutivo en la recta final del “Ségur de la santé”, el proceso de concertación entre distintos agentes sociales para diseñar una reforma sanitaria.

Esta jornada tendrá menos peso en la balanza ya que se habían convocado muchas menos movilizaciones (un centenar en todo el Hexágono según CGT) y ha tenido una participación más reducida: varios miles de manifestantes en París; al menos 1.200 en Lyon según la Prefectura; entre 1.600 y 3.000 en Nantes; de 700 a 1.500 en Montpellier; y unos cientos en las de Clermont-Ferrand, Grenoble, Estrasburgo o Dijon.

Menos numerosas pero no menos determinadas, como Sandrine Coudriaud, asistente de enfermería alsaciana, que ha acudido para reclamar «un salario justo como los guerreros que somos, enviados al frente sin protección» durante la pandemia del coronavirus.

«La salud no tiene precio»

«Queremos, sobre todo, medios para hacer bien nuestro trabajo», incide Mylène Rigaud, operadora de radiología en Auvernia, que no quiere «tener que elegir entre un paciente que está en trance de morir en el pasillo y otro que está desatendido en un box de urgencias».

El “Ségur de la santé”, puesto en marcha a finales de mayo para concretar «el plan masivo de inversiones y revalorización» prometido por Emmanuel Macron, debería satisfacer estas demandas.

Pero las partidas propuestas por el ministro de Salud (300 millones para los médicos del hospital, 6.000 millones para el personal no médico) están lejos de las esperanzas suscitadas por esta gran concertación. 

Para el lyonés Stéphane, auxiliar de oncología, «seis mil millones no son suficientes cuando vemos lo que inyectan, por ejemplo, en la aeronáutica, porque la salud no tiene precio».

En la misma comitiva, Nadia, celadora, afirma que «los planes para el hospital público se quedan siempre en promesas, si hoy estamos aquí es porque nunca se han cumplido, y el Ségur es, una vez más, solo humo».

«Las cuentas no salen»

Todos se acuerdan de los precedentes anuncios gubernamentales que no han logrado detener este movimiento social iniciado en la primavera de 2019.

«Hace ya más de un año que el personal sanitario viene manifestándose», resalta Philippe Martinez, el líder de la CGT, al inicio de la manifestación de París.

El dirigente sindical reclama «actos que estén a la altura de los agradecimientos» expresados durante la crisis sanitaria; en primer lugar, «dinero para el personal sanitario, mucho más del que se ha anunciado».

«Las cuentas no salen», ha confirmado su homólogo de Fuerza Obrera, Yves Veyrier, que considera que todavía «estamos en el punto de salida, la negociación no ha hecho más que comenzar».

Pero el tiempo se agota porque el “Ségur de la santé” debe finalizar este viernes, con una última reunión presidida por la antigua dirigente de la CFDT Nicole Notat.

A partir de ahí, el presidente francés podría anunciar la próxima semana sus «arbitrajes».

Altas expectativas

Preguntado sobre una posible ampliación del presupuesto, el ministro de Finanzas, Bruno Le Maire, ha comentado este martes que el Gobierno podría «llegar hasta ahí», sin avanzar ninguna cifra. «Haremos lo que sea necesario por el personal sanitario», ha declarado.

Las expectativas son muy altas: solo el aumento general de 300 euros netos mensuales que reivindican todos los sindicatos costaría 7.000 millones, según ha indicado el secretario general de FO-Santé, Didier Birig.

Eso sin tener en cuenta la situación de «los internos y los médicos jóvenes, que reciben retribuciones indecentes, ni la diferencia salarial entre el sector público y el privado», como subraya el Colectivo Inter-Hospitales.

La CGT también critica que «la cuestión de las contrataciones de personal» no se aborde en el marco del Ségur.

El Gobierno, por su parte, se ha comprometido a desbloquear más recursos para la inversión, además de la recuperación ya programada de un tercio de la deuda hospitalaria por parte de la Seguridad Social. Pero todavía queda por conocer cuál será el montante de esta partida presupuestaria.