Dupond-Moretti, que inició su carrera en derecho laboral y ha actuado en procesos de alto voltaje político como Tapie, Castela, Mehara o Assange, sería el interlocutor de la delegación vasca en sustitución de la ministra Nicole Belloubet, bajo cuyo mandado fueron acercados la mayoría de presos de EPPK a Lannemezan y Mont-de-Marsan. Ese diálogo quedaría después bloqueado en los casos de largas condenas.

El nuevo ministro del Interior será el hasta ahora titular de Hacienda, Gérald Darmanin, un hombre procedente de la derecha y que en ocasiones ha sido comparado con el expresidente Nicolas Sarkozy, mientras que Cultura ha caído en la también exministra conservadora Roselyne Bachelot, conocida por sus controversias.

La ecologista Barbara Pompilii pasará a asumir Transición Ecológica, mientras que pesos pesados del Ejecutivo como los ministros de Exteriores, Jean-Yves Le Drian; Economía, Bruno Le Maire; o de Educación, Jean-Michel Blanquer; conservan sus puestos.

El Gabinete, que estará encabezado por el nuevo primer ministro, Jean Castex –designado el pasado viernes–, se caracteriza por la continuidad, el bajo perfil político de sus integrantes, la desaparición de algunos referentes que venían de la izquierda y la ausencia de grandes novedades, salvo Dupond-Moretti.

Hay ocho caras nuevas en un Gobierno formado por 30 ministros, 17 mujeres y 13 hombres, y que frente a los medios tendrá un portavoz con cargo de secretario de Estado, el joven «macronista» Gabriel Attal.