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Los Hermanos Musulmanes vuelven a las urnas en Jordania

Tras haber decidido no participar en las dos elecciones precedentes por falta de garantías, los Hermanos Musulmanes se encuentran inmersos una campaña activa de cara a las legislativas del 20 de setiembre en Jordania con el objetivo de regresar a la escena política.

El resultado del Frente de Acción Islámica (FAI), brazo político de la cofradía, es la gran incógnita de unos comicios que renovarán la Cámara de Diputados para cuatro años.

Pero los Hermanos Musulmanes atraviesan un momento delicado, debilitados por las divisiones internas y la represión. Tolerados durante décadas, tienen una relación tensas con el poder tras las revueltas de la primavera árabe de 2011. Es considerada asociación ilegal.

«Queremos elecciones creíbles que traduzcan la real voluntad del pueblo, independientemente de los resultados o del grado de representación que tengamos en el Parlamento», dijo a AFP Zaki Bani Irsheid, uno de sus principales dirigentes.

La cofradía boicoteó los comicios de 2010 y 2013 denunciando fraude y reclamando revisar el sistema electoral. Al anun- ciar en junio su participación en estas legislativas, instó al poder a «garantizar la transparencia de la consulta y poner fin a la intervención de los organismos oficiales en su desarrollo y escrutinio».

Para Irsheid, «Jordania debe aprovechar esta ocasión para restablecer la confianza de los ciudadanos en el proceso electoral y en las instituciones».

El FAI logró sus mejores resultados en 1989, cuando logró 22 de 80 escaños. Pero para el analista Labib Qamhaui, «el Estado no permitirá elecciones libres como en 1989. No asumirá el riesgo cuando el país atraviesa un periodo muy delicado».