Kirolbet Baskonia no tiene margen para el error si quiere continuar en la competición europea. Los de Pedro Martínez reciben esta noche a las 21.00 a Fenerbahçe en el Buesa Arena con la misión de empezar a levantar un 2-0 adverso en los cruces de cuartos de final de la Euroliga. Después de caer con claridad en el primer partido, el buen hacer del segundo debe suponer para los gasteiztarras un espaldarazo en sus opciones, por muchos efectivos que tenga el cuadro otomano y trucos en la chistera Zeljko Obradovic.

Para empezar, una buena noticia: Jayson Granger jugará, o al menos estará listo para jugar este match ball. Después de que un esguince en su tobillo derecho obligara al base uruguayo a perderse los dos primeros partidos de la serie, estará disponible para Pedro Martínez.

La diferencia física entre los bases otomanos –Wanamaker y Sloukas– ante Huertas y Vildoza –en especial el paulista– está siendo uno de los factores diferenciales que están decantando la serie para los de Obradovic. Así las cosas, el retorno de Granger es como agua de mayo para la moral de la afición baskonista. En todo caso, Pedro Martínez quiso templar gaitas sobre este aspecto, y recordó que el base uruguayo no solo se ha perdido una serie de partidos, sino también el «ritmo competitivo».

«Jayson estará para hacer la rueda y a disposición. Otra cosa es que él lleva tiempo fuera y necesita recuperar las sensaciones, cosa que se consigue jugando o entrenando. Está en la parte final de superar la lesión, pero hay una lógica incógnita. Tras haber estado dos semanas fuera, sin entrenar ni competir, casi sin poder vivir el día a día del equipo, eso hace que no esté en una excelente disposición de jugar. Pero somos de la idea de que necesitamos a todos los jugadores, y si Jayson nos puede echar una mano, pues bienvenido sea», explicó el técnico barcelonés en su rueda de prensa previa al choque.

Jugar un muy buen partido

«Solo hemos hablado de obviedades», sorprendió Pedro Martínez, para matizar al momento. «Jugamos ante un grandísimo equipo y para ganarles tendremos que hacer un muy buen partido, pero ahora tenemos la oportunidad de hacer ese partido completo».

A pesar del mal resultado hasta la fecha en la eliminatoria, el preparador baskonista dijo observar una «muy buena mentalidad» en su equipo. «Creo que estamos haciendo las cosas en la dirección correcta, pero hay que hacerlo un poquito mejor; no muchísimo, pero sí un poquito mejor», apostilló. Pero para hacerlo «un poquito mejor», subrayó la necesidad de «creer en nosotros mismos». «De otro modo es imposible», advirtió. «Ellos son muy buenos, pero nosotros también», remachó.

Por otro lado, cuestionado sobre el arbitraje recibido en Estambul en el segundo partido, Pedro Martínez confesó que en el duelo del pasado viernes no acabaron del todo contentos con el arbitraje en la primera parte en un momento en el que jugaban muy bien. Por ende, el entrenador de Kirolbet Baskonia recalcó que los turcos «vivieron de situaciones de tiros libres» que a los baskonistas no les parecieron bien pitadas.

A pesar de todo, no tardó en reconocer que los de Zeljko Obradovic «jugaron un punto mejor» que su plantilla y quiso matizar que no pueden «caer en las lamentaciones» a pesar de estar crispados en la media parte de aquel partido.

Asimismo, Martínez quiso restarle mitología al influjo de la grada, pese a reconocer su importancia. «Es evidente que el apoyo de nuestros aficionados nos da una energía extra, lo mismo que al Fenerbahçe, y aunque no garantiza nada, creemos que va a ser importante», expresó, aunque, a su juicio, lo que de verdad anima a sus aficionados es «que juguemos bien a baloncesto».

Valoró que está siendo «un play off tremendamente exigente por la calidad del rival», por lo que afirmaba que deben aprovechar la exigencia de este rival «para sentar las bases para futuros enfrentamientos».

«No podemos pensar solo en la competición y hay que intentar mejorar siempre. La exigencia de la competición es un buen campo para ello», finalizaba el técnico del Baskonia.

 

Jeff Brooks, de Unicaja, dado de alta

En el partido de la Liga ACB del domingo entre Valencia Basket y Unicaja, el jugador malagueño Jeff Brooks dio un tremendo susto al tener que ser hospitalizado después de desplomarse en el tramo final del partido de La Fonteta.

Afortunadamente, el ala-pívot norteamericano, que pasó la noche en el Hospital de la Fe Valencia, fue dado de alta después de que las diversas pruebas realizadas no encontraran mayores anomalías. Brooks padeció un síncope y ese fue el motivo de su desvanecimiento. Al final, todo quedó en un susto, ya que el jugador jamás perdió la consciencia.

De hecho, el propio jugador escribió agradecido a través de su cuenta de twitter, «por todas las oraciones y ánimos recibidos». «Muchas gracias de mi parte y también de mi familia. Gracias a mis compañeros y al staff por su ayuda, así como a los miembros de Valencia Basket. Fue un momento aterrador, pero ya me encuentro bien», añadió. GARA