El Ibex pudo ayer despegarse de sus mínimos de cinco meses y recuperar el nivel de los 9.400 puntos. El cierre en verde después de cuatro caídas consecutivas no tuvo ningún argumento de peso a su favor. Ni la crisis de la lira turca, profundizada en estos días por las disputas arancelarias de Ankara con EEUU, ni la tragedia del puente Moranti en Génova, que podría dejar en una situación delicada el futuro de Atlantia si retiran concesiones de autopistas a su filial Autostrade, respaldaban las compras en la renta variable. No obstante, las fuertes cesiones de las jornadas precedentes habían dejado las acciones a precios atractivos, según las explicaciones de distintos analistas. También suponía un soplo de aire fresco en medio de la guerra comercial el anuncio de más conversaciones entre EEUU y China para tratar de reconducir la situación después de haberse impuesto recíprocamente aranceles.

El Ibex acabó con 9.427,60 puntos, tras ganar un 0,43%. En Europa, los cierres fueron positivos para Fráncfort (+0,61%), París (+0,83%) y Londres (+0,78%), mientras que Milán (-1,83%) se veía arrastrado otra vez por la negativa influencia del accidente de Génova y el derrumbe bursátil de Atlantia (-22%).

Dentro del Ibex, BBVA (+1,63%) volvía a respirar después de haber encajado hasta ocho caídas consecutivas por la depreciación de la lira turca. En la parte alta de la tabla destacaban también Amadeus (+1,46%) y Caixabank (+1,33%). En el extremo opuesto, los peores fueron ACS (-1,97%) –socio de Atlantia en Abertis–, Siemens Gamesa (-1,51%) y Ferrovial (-1,20%). En París, las ganancias fueron lideradas por Publicis (+2,30%) y LVMH (+2,28%), frente a Valeo (-0,36%), el valor más castigado de la sesión.