Mikel INSAUSTI
EL ESPÍA QUE ME PLANTÓ

Las mujeres se ríen de los superagentes

Que nadie piense que los distribuidores continúan sacándose títulos de la manga para la versión doblada al castellano, porque por una vez el juego de palabras viene de la traducción literal. Fue Mike Myers quien parodió la película Bond “The Spy Who Loved Me” (1977), y que conocimos correctamente como “La espía que me amó”, en su loca comedia desmitificadora del género “Austin Powers 2: The Spy Who Shagged Me” (1999), que se quedó en aquel divertido “Austin Powers 2: La espía que me achuchó”. La cosa no termina ahí, porque ahora nos llega “The Spy Who Dumped Me”, que da margen para seguir parafraseando hasta en el infinito con ese cambio de sexo por “El espía que me plantó”. Guiños y más guiños aparte, supone una enbromada declaración de intenciones por parte de la realizadora y coguionista Susanna Fogel, creadora de la serie televisiva “Chasing Life”, con mujeres que se ríen de la prepotencia masculina representada por los superagentes secretos.

Aunque sobre el papel pudiera parecer que con la humorista Kate McKinnon encabezando el reparto lo que se va a ver es otra comedia gamberra femenina, lo cierto es que Susanna Fogel cumple con los requisitos del cine de acción y rentabiliza al máximo los 40 millones de presupuesto, sin envidiar a otras grandes producciones de espionaje con localizaciones cosmopolitas y persecuciones espectaculares. Rodada en Europa, la película podría pasar por una entrega más de las aventuras de 007, salvo por el detalle de que los espías son ridiculizados a conciencia a través de una enmarañada trama que comienza cuando la estelar Mila Kunis se entera de que su ex trabaja para la CIA. Junto a su amiga y compañera de viaje tendrá que huir al viejo continente, dónde conocera al desfasado prototipo bondiano en la caricatura veleidosa del actor escocés Sam Heughan.