Amaia U. LASAGABASTER
EIBAR

Los refuerzos adelgazan en número de efectivos y en euros

Pese a haber ingresado siete millones por ventas, el club azulgrana ha gastado menos en fichajes que las dos temporadas anteriores.

El Eibar debutará el domingo en Liga con la plantilla más cara de su historia, en consonancia con un presupuesto que no deja de crecer (serán 49 millones este ejercicio) y de una burbuja que no deja de hincharse. Sin embargo, no todas las cifras crecen. Tras tocar techo hace dos años, y aunque restan todavía dos semanas de mercado que pueden dar para mucho, el club azulgrana ha reducido este verano el número de refuerzos y también el dinero que ha desembolsado en hacerse con ellos.

Por segundo año consecutivo, además, ha conseguido que los ingresos en este apartado superen a los cheques expedidos en la oficina de Ipurua. Incluso contando el «fichaje» de Orellana, cuya cesión incluía una cláusula obligatoria de compra en caso de permanencia, que el club ejecutó ya antes de acabar el pasado curso y cuyo montante rondaría los 2’4 millones de euros. Se unirían a los aproximadamente 3’5 –en ambos casos sin confirmar, ya que el Eibar nunca hace públicas las cifras de las operaciones– que ha desembolsado el club al Sporting por el traspaso de Sergio Álvarez. Algo menos de seis millones en un inicio de curso en el que las ventas se han ido hasta los siete: los tres de Ander Capa, ya pactados con el Athletic un año antes, y los cuatro que ha abonado el Getafe por hacerse con Alejo.

Dos negocios redondos para el Eibar, teniendo en cuenta que el portugalujo llegó en categorías inferiores y que por el vallisoletano apenas se pagaron 300.000 euros un año antes.

Bigas y Cardona, cedidos

También entonces las cuentas fueron positivas, pese a que el club gastó más de lo que ha hecho ahora, en el que no ha tenido que pagar por el resto de adquisiciones –Bigas y Cardona han llegado cedidos con opción de compra–. Fueron más incorporaciones y más dinero. Se pagaron esos 300.000 euros por Alejo, 700.000 por Dmitrovic, un millón por Jordán y, en el que sigue siendo el traspaso más caro en la historia del club, cuatro por Paulo, además de los 750.000 euros de la opción de compra de Yoel que ejecutó el club al finalizar la campaña anterior. Menos de siete millones en total para un Eibar que cobró bastante más, diez millones, con una sola venta, la de Lejeune al Newcastle.

Otro caso de rentabilidad apabullante: el francés había llegado a Ipurua el verano anterior previo pago de 1’5 millones. Fue en esa temporada, la 16/17, cuando el Eibar alcanzó su récord en traspasos. Son más de 8’5 millones repartidos en media docena de operaciones: Rubén Peña (200.000), Arbilla (700.000 más variables hasta alcanzar el millón), Lejeune (1’5), Gálvez (1’5), Bebé (1’5) y, el más caro hasta aquel momento, Nano (3’2). No es de extrañar que el saldo fuera negativo aquel verano, pese a que el club había firmado otra de sus mejores operaciones, con el traspaso de Keko al Málaga por cinco millones.

No hubo venta que amortiguara el gasto en la temporada 15/16. Pese a que el equipo, renovado casi por completo, se reforzó principalmente con futbolistas que llegaron con la carta de libertad (nueve) y cesiones (seis), también tuvo que pasar por caja. Aunque lo hizo escalonadamente. Saldó el verano con los 300.000 que pagó al Eintracht por Inui y a la vuelta de Navidades abonó alrededor de un millón al Catania para hacerse con Escalante, que había llegado en calidad de cedido. Ese mismo invierno fichó a Kike García a cambio de 1’8 millones aunque, por problemas burocráticos, el delantero no pudo jugar hasta la campaña posterior.

Sólo ese traspaso ya multiplicaba por más de veinte el primero que había pagado el Eibar en toda su historia, apenas un año antes. Fue en vísperas de estrenarse en Primera, el verano de 2014, cuando pagó 75.000 euros al Barcelona por Dani Nieto. El saldo le salió a favor porque seis meses después el Derby County abonaba los 600.000 euros de la cláusula de Raúl Albentosa pero, con perspectiva, es evidente que ninguna de las dos operaciones fue beneficiosa.

Desde aquel traspaso de Nieto hasta el de Sergio Álvarez, el Eibar ha invertido más de 24 millones de euros en 18 fichajes y ha cobrado casi 23 por cinco jugadores.

 

Dos bajas seguras frente al Huesca

El inicio de curso, por fortuna, no tiene nada que ver con el anterior pero tampoco esta vez se libra el Eibar de debutar en Liga con la enfermería ocupada. Se confirman las lesiones de Pedro León e Iván Ramis, que se perderán, como mínimo, las dos primeras jornadas.

El murciano ya lleva varias jornadas con problemas en la espalda que, de hecho, le impidieron viajar el pasado fin de semana a Alemania para disputar los dos últimos amistosos veraniegos. El parte médico confirma que sufre una «lumbalgia aguda» y establece un tiempo de recuperación de entre diez y quince días. Algo más tendrá que esperar, en principio, Ramis. Las molestias que le forzaron a abandonar el entrenamiento del miércoles se deben a una «microrrotura fibrilar en el bíceps femoral de la pierna derecha», que le mantendrán de baja dos o tres semanas.

Serán las únicas ausencias forzosas en el debut liguero, después de que Gálvez y Cardona se hayan recuperado. A.U.L.