Alberto CASTRO
Al cierre

Sin rebote balsámico

Ayer tampoco se produjo el rebote balsámico que modere la actual situación de miedo en la bolsa. El Ibex trataba por la mañana de asentarse en la zona de ganancias y superar los 8.800 puntos, pero después se produjo un giro que le llevó hasta por debajo de los 8.700 puntos.

Los mercados siguen presionados por el enfrentamiento de Bruselas y Roma en el tema presupuestario, que podría derivar, si se mantienen las actuales posturas, en un riesgo de estabilidad para el euro. El vicepresidente italiano Matteo Salvini respondía con dureza a la Comisión Europea al asegurar que no cambiarán sus objetivos de déficit a pesar del rechazo del pasado martes a su borrador presupuestario. Tampoco ayudaban a las cotizaciones los índices PMI de actividad manufacturera y de servicios en la eurozona de octubre, que insisten en advertir síntomas de desaceleración.

El Ibex terminó con 8.677,40 puntos, después de recortar un 0,56%. Los bancos siguen rodando cuesta abajo. Sabadell caía un 3,30%; Caixabank, un 2,34%; BBVA, un 2,04%; Bankia, un 1,83%; Santander, un 1,41%; y Bankinter, un 1,36%. Perdieron más terreno ArcelorMittal (-5,79%) y Dia (-5,65%). Entre los alcistas, los mejores de la jornada bursátil fueron Siemens Gamesa (+1,93%) y Colonial (+1,84%).

Las bolsas europeas, excepto Londres (+0,11%), acabaron también en números rojos. Fráncfort cayó un 0,73% y París, un 0,29%, mientras Milán (-1,69%) sufría por la subida de la tensión en las relaciones con Bruselas. En Wall Street, los índices principales se movían con pérdidas al cierre de la sesión en Europa, condicionados por las críticas renovadas de Trump contra la Fed y resultados empresariales por debajo de las expectativas, lo que no ha ocurrido con las entidades bancarias.