«Hay que disfrutarlo al día siguiente, pero luego hay que pensar en el partido posterior». Es una de las frases que Abelardo Fernández pronunció antes de enfrentarse al Villarreal. Por tanto, es de esperar que los babazorros disfrutasen de los últimos tres puntos el mismo lunes para inmediatamente dar cabida a la preparación del duelo copero de hoy en el que se verán las caras con el Girona –por primera vez esta temporada–.

Cumplido, prácticamente, la mitad del principal objetivo liguero –suma veinte puntos– el envite de la Copa llega en un momento en el que Abelardo tendrá que optar por las rotaciones para así mantener a la plantilla completa en plenas garantías. Algunos cambios serán obligados por las lesiones de Ximo Navarro y Wakaso o la ausencia por sanción de la pasada edición de Tomás Pina, pero tendrá que plantearse dar algún descanso a los jugadores más ofensivos del equipo como Ibai, Jony o Calleri, las piezas más fundamentales en ataque.

Sea como sea, los cambios que haga el míster asturiano buscarán formar un equipo competitivo y capacitado para vencer a un Girona de Eusebio Sacristán que llega plagado de lesionados. Además de la baja de larga duración de Mojica, otros tres jugadores se sumaron a la lista de la enfermería tras lesionarse el pasado fin de semana: Aday Benítez, Juanpe y Portu están descartados para hoy, así como Alex Granell y el uruguayo Stuani, que no participó en la victoria frente al Rayo Vallecano.

Dicho triunfo fue el tercero que sumaba el conjunto catalán que volvía a la senda de los tres puntos después de un mes sin ganar, con tres empates y dos derrotas intercaladas. Empezó la jornada con dos puntos de ventaja sobre el descenso y actualmente es undécimo con trece puntos –siete menos que la escuadra babazorra–.

Segunda vez

Será la segunda vez que se enfrenten gasteiztarras y gerundenses en la competición copera. El Girona venció aquel único enfrentamiento de la temporada 2013-2014 desde el punto de penalti (4-2). Abelardo inició su andadura como técnico albiazul en el feudo del Girona, en el que fue el primer enfrentamiento en la máxima categoría (2-3).

No perder la esencia, objetivo de Abelardo

Abelardo Fernández dirigió en Montilivi su primer partido del Alavés frente al Girona y dicho duelo puede ya considerarse como el comienzo del resurgir del Glorioso. De ser últimos en la tabla el pasado diciembre al segundo puesto de la actual temporada; y todo ello en menos de un año.

«Mi objetivo es que mañana no perdamos la esencia», remarcó el técnico asturiano, a la vez que indicó que «es una oportunidad para la plantilla», en alusión a los menos habituales «que entrenan muy bien y que empujan a los titulares».

«No lo voy a medir como un examen porque para mí, los exámenes son los entrenamientos», subrayó Abelardo y apuntó que la eliminatoria es de 180 minutos y que todo se resolverá en Girona.A.U.A.